El Baskonia pagó en Tenerife el esfuerzo realizado tres días atrás contra el Maccabi y cayó con claridad ante un rival directo por el play off de la ACB que fue muy superior durante todo el encuentro y que se llevó también la batalla por el basket average. El conjunto gasteiztarra, de nuevo corto de efectivos pese al regreso a la convocatoria de Chiozza, intentó pelear el encuentro con acciones individuales de sus principales jugadores, pero no fue capaz de igualar la energía, el acierto exterior y sobre todo el mayor criterio de su rival, dirigido con maestría por un viejo conocido como Marcelinho Huertas.
Ivanovic repitió el quinteto inicial que tan bien funcionó contra el Maccabi con Miller-McIntyre, Marinkovic, Rogkavopoulos, Moneke y Kotsar. Esta vez, eso sí, al conjunto gasteiztarra le costó engrasar la máquina en ataque, ya que tardó tres minutos en anotar su primera canasta a causa de pérdidas y malos lanzamientos.
El Tenerife salió con las ideas algo más claras con el incombustible Huertas al mando, autor de los cinco primeros tantos locales, aunque cuando Marinkovic abrió la lata para el Baskonia el duelo se equilibró en ataque. El Santiago Martín acudió entonces a un intercambio de triples con Marinkovic, Rogkavopoulos, Doornekamp, Guy o Fitipaldo como protagonistas, aunque fueron los locales quienes estiraron más su acierto al cerrar el cuarto con un parcial de 7-0 con el que establecieron su primera renta importante (26-17).
El segundo cuarto comenzó algo mejor para los alaveses, que con los puntos de Theodore y Howard lograron recortar distancias y establecer la diferencia entorno a los cinco tantos, aunque sin llegar a incomodar a un Tenerife que daba la sensación de tener el duelo controlado y de anotar con mayor facilidad.
Eso sí, cada vez que los locales, que siguieron entonados desde el perímetro e hicieron daño por dentro cada vez que Kotsar se sentó en el banquillo, intentaron distanciarse en el marcador, llegó la respuesta azulgrana con acciones individuales de Rogkavopoulos, Kotsar o Moneke. Este último, de hecho, fue el autor de los últimos cinco puntos del Baskonia en una primera parte que terminó con un 46-41 en el electrónico.
Con más deseo que argumentos
Al regreso de vestuarios, el Baskonia se colocó por primera vez a una distancia de una canasta tras una bandeja de Marinkovic, pero la alegría duró poco, ya que el Tenerife respondió con un triple de Doornekamp, insaciable desde la esquina, y Huertas puso la máxima distancia hasta entonces con el 55-45 que obligó a Ivanovic a parar el encuentro. Los alaveses intentaron volver a entrar en el partido, pero cada vez que encadenaron dos buenas posesiones llegó inmediatamente la respuesta local.
Cortos de efectivos y con la fatiga acumulada del esfuerzo realizado ante el Maccabi, la desesperación azulgrana fue creciendo con el paso de los minutos. Comenzaron a errar algunas canastas fáciles, cometieron desajustes defensivos y el talento individual de Howard y Moneke resultó insuficiente ante el juego coral de los locales, que bajo la batuta de Huertas supieron encontrar las grietas en la defensa visitante y llegar al cuarto decisivo con un importante colchón de 13 puntos.
El Baskonia, con su resiliencia habitual, se negó a tirar la toalla y siguió plantando batalla, pero fue inútil. Al igual que sucedió durante toda la cita, siempre que los alaveses amagaron con agarrarse al encuentro el Tenerife tuvo respuesta para ello con su implacable acierto exterior. Con más ganas que juego, los alaveses encadenaron un parcial de 0-7 con dos canastas en transición (75-67), pero acto y seguido llegó un triple de Guy. Anotó Kotsar, replicó Sastre desde los 6,75 metros; apareció Howard y de nuevo Guy estiró la renta local con una acción de canasta y personal... No hubo manera.
Huertas, el mejor de la tarde, dio la estocada final a dos minutos y medio del final con el 86-72 que enterró definitivamente las opciones de remontada baskonistas y también las de salvar el average particular, que cae, con justicia, del lado de un Tenerife que supera a los vitorianos en la clasificación. No queda más remedio que levantarse y recuperar fuerzas para el vital duelo contra el Asvel.
