Los interiores baskonistas deberán calentar mañana bien el cuello antes de medirse al Alba de Berlín (20.30 horas), ya que posiblemente pasarán una buena parte del encuentro mirando hacia arriba para no perder de vista a Christ Koumadje, el jugador más alto de la Euroliga. El pívot chadiano dejó atrás a otras torres como los exbaskonistas Fall y Pleiss (ambos de 2,21 metros) o Tavares (2,20 m.) en su llegada a Berlín en el tramo final de la temporada 2020-21, momento desde el que el interior de 26 años ha dominado las alturas de la Euroliga con sus 2,23 metros (2,24 según otras mediciones como la de la ACB).
El fichaje del enorme interior africano fue un movimiento arriesgado por parte de la dirección deportiva comandada por el español Himar Ojeda, ya que sus precedentes en Europa no invitaban a pensar que fuera a estar preparado para competir en un torneo de la exigencia de la Euroliga. De hecho, al principio de esa misma temporada pasó por el Movistar Estudiantes con un contrato de tres meses, donde solo llegó a disputar seis partidos y menos de 30 minutos en la ACB, dejando en el club estudiantil el único recuerdo de haber igualado la marca de Ralph Sampson, también de 2,24 metros, como jugador más alto de la historia de la liga. Tras ello, fichó por el Avtodor Saratov ruso antes de recalar en febrero definitivamente en el Alba.
Pese a sus anteriores malas experiencias en Europa, Koumadje ha encontrado en Berlín un contexto idóneo en el que poder trabajar y crecer con tranquilidad, rodeado de un cuerpo técnico acostumbrado a lidiar con jugadores jóvenes y melones por abrir. El primer año llegó con el curso prácticamente terminado, pero la temporada pasada contó con la confianza de Israel González desde el principio y participó en 21 partidos de temporada regular, en los que promedió 5,95 puntos y 4,3 rebotes en 12 minutos de juego.
Esta Euroliga ha aumentado un poco más su protagonismo y registra 6,2 puntos y 4 rebotes de media en 13 minutos, aunque quizá lo más destacable es que ha sido titular en 16 ocasiones y ha añadido a su repertorio el arma de los tapones, estadística en la que es el cuarto mejor del torneo con 1,1 de media, por detrás de especialistas con mayor peso en sus equipos como Tavares (2,3), Papagiannis (1,2) y Hayes (1,1). El africano se ha adaptado al baloncesto europeo, ha aprendido a colocarse en la cancha y está explotando una faceta que ya dominó en la Liga de Desarrollo de la NBA, con unos increíbles 4 tapones por choque. Será un factor desestabilizador para el Baskonia, que, no obstante, ha demostrado en sus cuatro victorias contra el Madrid tener recursos para desactivar a otros gigantes como Tavares con el arme del triple.
