El próximo 25 de mayo cumplirá 40 años. Con esa edad muy pocos son capaces de aguantar la exigencia de una competición tan dura como la ACB. Aún menos de hacerlo al nivel que lo está haciendo Marcelinho Huertas.

El brasileño parece no tener fecha de caducidad. Al menos, esta no parece estar cerca viendo las lecciones que continúa impartiendo a sus 39 primaveras. Incombustible. Huérfano ya del físico que tenía hace diez años y que le permitió jugar en la NBA, pero manteniendo intacta su visión de juego y una clarividencia al alcance de unos pocos elegidos.

El exbaskonista es el metrónomo de este Tenerife. Marca el ritmo de una manera perfecta. La tropa de Vidorreta late al compás de la batuta de Huertas. Sincronizados.

Cinco asistencias por partido

Sigue siendo un mago a la hora de dar asistencias. Con más de cinco por partido, aparece en el top 5 de mejores pasadores de la ACB. A su capacidad para regalar puntos a sus compañeros, añade su buen tiro de tres (42%), su picardía para robar algún balón de vez en cuando y aún sigue metiendo puntos en momentos clave. Más de 10 promedia en el torneo doméstico.

72

Los de Vidorreta son un muro. Con una media de 72 puntos encajados, son la mejor defensa de la ACB.

Además, en Tenerife se ha encontrado un socio perfecto con el que ejecutar el temido pick&roll en Gio Shermadini. El georgiano es el complemento perfecto. Un binomio letal. Los números del interior así lo confirman. Es el más valorado del equipo (18), el que más puntos mete (14), el que más rebotes captura (5), faltas recibe (4,6) y mates realiza (1,2). Una pesadilla.

Sin embargo, el cuadro insular es mucho más que estos dos jugadores. De hecho, solo con ambos hubiese sido imposible estar en lo más alto buena parte del curso. En la dirección destaca el papel de un campeón de Europa como Jaime Fernández –11 puntos y 2,5 asistencias–, el acierto letal de un killer como Salin –10 puntos con un 43% en triples– o el peligro de otros dos interiores versátiles como Abromaitis y Doornekamp.

+ Jaime Fernández ha aterrizado con el pie derecho. El exterior madrileño es un pilar en su nuevo equipo. Promedia 11 puntos, 2,1 rebotes y 2,5 asistencias y es el segundo más valorado (11,2).

- Un quinteto fiable y un par de recambios de nivel. Sin embargo, la falta de profundidad de banquillo le puede pasar factura en un torneo tan exigente y de tanto desgaste.