El Baskonia continúa con su particular ronda de presentaciones de fichajes para la temporada 2021-22 y, después de que Granger y Baldwin se sometieran a rueda de prensa el lunes, hoy ha sido el turno de Vanja Marinkovic y Simone Fontecchio, dos piezas con experiencia en la Euroliga y que llegan para reforzar el perímetro baskonista. La contratación más sonada fue la de Fontecchio, ya que el Baskonia se adelantó al interés de media Europa después de la excelente campaña firmada por el alero italiano en las filas del Alba Berlín. En el caso del escolta serbio, se trata de un viejo anhelo de la dirección deportiva azulgrana, que ha visto este verano la posibilidad de contratarlo como agente libre después de no entrar en los planes del Valencia Basket y haber disputado solo 15 partidos en Euroliga y 11 en la ACB.
A sus 24 años, uno menos que Fontecchio, aún tiene margen de progresión y su deseo es reivindicarse en Vitoria. "Los dos últimos años no han sido muy buenos para mí. Esperaba tener un rol importante y fue todo lo contrario. Me lo pasé bien y tuve grandes compañeros, pero lo que quiero es jugar", relató Marinkovic. Ahora empieza "una etapa muy diferente" para él: "He hablado con otros jugadores que han entrenado con Ivanovic, estoy con ganas de trabajar con él y muy contento de estar aquí". De hecho, ya empieza a asimilar algunos de los conceptos del técnico montenegrino. "La defensa es lo primero y es en lo que estamos trabajando. Si defendemos bien, las oportunidades de anotar en ataque llegarán, no importa cómo ni de qué manera", respondió el exvalencianista cuando fue preguntado por lo que va a aportar al equipo.
Marinkovic está dispuesto a pelear por todos los títulos en un "gran club" como el Baskonia, pero tiene claro cuál es su competición fetiche. "La ACB es muy difícil para mí, no me preguntéis por qué. Siempre me ha gustado más jugar en la Euroliga. En cualquier caso, espero tener un papel más importante en ambas competiciones que en los dos últimos años", sentenció.
La mano de Polonara
Fontecchio, que se animó a realizar algunas de las respuestas en español, también se mostró ilusionado por esta nueva etapa. "Estoy muy contento de estar aquí. Creo que es un lugar perfecto para seguir creciendo como jugador. Siempre ha sido mi sueño jugar en la ACB y poderlo hacer con un club histórico como el Baskonia me llena de orgullo", aseguró el italiano. Tras su gran temporada y excelente rendimiento con Italia en los Juegos Olímpicos, es consciente de que se le va a exigir más que en la pasada campaña y le va a tocar ser uno de los líderes de este Baskonia, pero está dispuesto a afrontar el reto. "Seguramente vaya a tener más responsabilidad, pero eso era lo que buscaba y creo que me va a venir bien. Quería venir aquí para convertirme en mejor jugador y estoy preparado para asumir galones", expresó, en una declaración de intenciones.
El Baskonia ha tenido que adelantarse al interés de otros grandes equipos de Europa para convencer a Fontecchio y un exazulgrana como Polonara ha podido ser clave en la decisión de su compatriota de venir a Vitoria-Gasteiz: "He pasado muchos días con Achille este verano, tuvimos una bonita experiencia en Tokio y solo me ha hablado cosas positivas del Baskonia. Ha sido una decisión muy fácil". En cuanto a lo que puede aportar al equipo esta temporada, el italiano dijo que intentará sumar "sobre todo intensidad y defensa", aunque también en cualquier cosa que el entrenador le pida en ataque. "Creo que vamos a tener muchas soluciones en ataque y todos tendremos nuestras oportunidades de encestar, pero para mí la prioridad es la defensa", declaró.
El transalpino deberá compartir puesto con una de las piezas predilectas de Dusko como es Rokas Giedraitis, algo que él no ve como un problema. "Es una de las cosas que he hablado con Dusko. Creo que para él no importa el rol de cada jugador. Somos muy parecidos, pero creo que vamos a repartirnos bien la cancha y que va a funcionar", sentenció Fontecchio, que vestirá el dorsal número 20 esta campaña, mientras que Marinkovic jugará con el 9.
