El TD Systems afronta esta tarde el primer paso del exigente desafío en el que se ha transformado para los discípulos de Dusko Ivanovic el epílogo de la fase regular de la Euroliga. El conjunto vitoriano necesita protagonizar un sprint casi perfecto para recortar la desventaja que en estos momentos mantiene con los ocho primeros clasificados y, para ello, superar al Bayern de Munich se antoja imprescindible.

Un adversario el alemán que, en ejercicios precedentes, sería sinónimo de cierta tranquilidad para los gasteiztarras. Sin embargo la situación ha dado un giro radical en los últimos meses, en los que la escuadra bávara se ha convertido en la gran revelación del torneo continental. La progresiva evolución que ha venido experimentando -con la decidida apuesta de la Euroliga por entrar con fuerza en el mercado alemán- ha terminado por explotar este curso y a estas alturas tiene ya virtualmente asegurado el billete para la que sería su primera aparición (en seis participaciones) en la eliminatoria de cuartos de final.

El combinado de Andrea Trinchieri, de hecho, es cuarto y aspira incluso a colarse en el play off como cabeza de serie. Por lo tanto, el examen al que se enfrenta hoy el TD Systems es de enorme complejidad. Una dificultad que ya experimentó en carne propia en el encuentro de la primera vuelta entre ambas escuadras, cuando cayó derrotado con claridad (77-66) en Munich. Un choque que debe servir de modelo para los gasteiztarras, obligados a no repetir los mismos errores que les condenaron entonces.

Y es que, si desea continuar manteniendo vivo el sueño de acceder al Top 8, el Baskonia no puede permitirse esta tarde un nuevo tropiezo. La derrota de la pasada semana en Barcelona interrumpió la racha de cinco victorias consecutivas que acumulaba -la mejor de los azulgranas desde que arrancó el curso- y necesita reencontrarse de inmediato con el triunfo. Más todavía teniendo en cuenta que el encuentro se disputará en el Buesa Arena.

La buena noticia es que, pese a caer frente al todopoderoso Barcelona, el cuadro vitoriano plantó cara al coloso culé y mantiene un nivel de juego que permite cierta dosis de esperanza. Necesitará en cualquier caso el plantel de Dusko Ivanovic ofrecer su mejor versión si no quiere volver a ser presa de las garras de un Bayern cada vez más seguro de sus posibilidades.

Una de las grandes batallas de la contienda estará, sin duda, en la dirección de ambos conjuntos. Y es que de la capacidad que tengan Henry y Vildoza para imponer el ritmo de partido que más le interese al Baskonia y, sobre todo, minimizar la incidencia en el mismo de Baldwin dependerá en gran medida el desenlace final.

El estadounidense es la gran referencia del conjunto alemán y con su capacidad para anotar y desequilibrar las defensas desde el uno contra uno se convierte en un peligro letal para quien no sea capaz de atarlo en corto. El TD Systems, en cualquier caso, ya ha sido capaz de domar a otras amenazas y debe volver a hacerlo para poder continuar soñando con el Top 8.

DUSKO IVANOVIC: EL TÉCNICO EXIGE "AGRESIVIDAD"

Rival exigente. A estas alturas es de sobra conocida la filosofía de Dusko Ivanovic y ayer la volvió a dejar clara al analizar el importante partido ante el Bayern. "La agresividad defensiva será muy importante pero sobre todo para nosotros porque ellos juegan todos los partidos así. Y nosotros tenemos que hacerlo, como mínimo, mínimo, igual que ellos", exigió. En este sentido, el montenegrino insistió en la necesidad de ofrecer un rendimiento sin altibajos para poder tener opciones de éxito. "Siempre es importante comenzar bien pero debemos ser capaces de jugar cuarenta minutos bien porque el Bayern es un equipo que nunca se rinde. Juega a su ritmo, defiende muy bien, tiene jugadores altos que les permiten trabajar muy bien atrás y además muchos que pueden decidir el partido. Sobre todo Baldwin, Reynolds y Lucic, que son sus tres pilares, pero cualquiera puede salir y meter veinte puntos así que se trata de un equipo muy completo", analizó.