El TD Systems recibirá este miércoles en el Buesa Arena a partir de las 19.00 horas a un Olympiacos que no pasa su mejor momento en el aspecto deportivo, pero que mantiene ese distintivo aura de equipo mítico de la Euroliga, gracias a su historia y a la presencia de clásicos de la competición como Kostas Papanikolau, Georgios Printezis, Kostas Sloukas y, sobre todo, Vassilis Spanoulis.

El legendario base griego, que tantas veces ha llevado al Baskonia por el camino de la amargura a lo largo de su dilatada carrera deportiva, podría pisar mañana por última vez el parqué del Fernando Buesa Arena. El jugador, que cumplirá 39 años el próximo mes de agosto, ya dejó caer en enero que el momento de su retirada está cerca, por lo que no sería de extrañar que colgara las zapatillas al finalizar la actual temporada.

Spanoulis es sin duda uno de los primeros jugadores que se vienen a la mente al pensar en la Euroliga. A pesar de que no logró triunfar en la NBA, donde solo jugó un año en los Houston Rockets, se ha labrado un nombre entre los grandes de la historia del baloncesto gracias a su trayectoria en el Viejo Continente, donde ha logrado alzarse con tres Euroligas, una con el Panathinaikos en 2009 y dos con el Olympiacos, en 2012 y 2013.

De hecho, fue definido por su compatriota Giannis Antetokounmpo como "el Kobe Bryant europeo". Sin embargo, los años no pasan en balde, y las últimas temporadas lo han humanizado. En el partido de la primera vuelta contra el Baskonia sumó siete puntos y dos asistencias en 15 minutos, números cercanos a sus promedios en Euroliga esta temporada.

Quizá mañana no sea la mayor amenaza de los de El Pireo, pero a los que le conocen bien, como es el caso de Dusko Ivanovic, sentirán un pequeño escalofrío cuando ese tipo de 1,93 metros, barba, frente despoblada y semblante imperturbable ingrese a cancha desde el banquillo. El griego acumula una amplia colección de exhibiciones en el torneo continental, algunas de ellas con el Baskonia como víctima.

El Buesa Arena fue testigo de su máxima cifra de asistencias en un partido de Euroliga, cuando en el curso 2016-17 repartió 15 pases de canasta, además de sus 15 puntos, que le sirvieron al Olympiacos para llevarse la victoria por 90-95. En la temporada 2014-15 volvió a deslumbrar al alcanzar los 27 puntos en Vitoria, cerca de su récord de 34, aunque aquella vez no sirvieron para evitar la victoria azulgrana por 89-70.

La última vez que el griego anestesió al Baskonia data de la temporada pasada, cuando en El Pireo sumó 16 puntos, 3 rebotes y 4 asistencias, con 4 triples anotados en 5 intentos, que tumbaron a los de Dusko Ivanovic, 80-70. En otras ocasiones, sin embargo, ha sido el veterano base el que ha mordido el polvo. La más sonada fue la del play off de 2006, cuando los vitorianos lograron darle la vuelta a la eliminatoria y pasar de ronda gracias a una victoria en Atenas en el partido decisivo, gesta que algunos aficionados baskonistas recordarán como el Oakazo.

UN JUGADOR FAMILIAR La gran pasión de Spanoulis, además del baloncesto, es la familia. El griego perdió a su padre de niño y practicar este deporte le ayudó a sobrellevarlo y, al hablar de su retirada, adelantó que le gustaría seguir ligado al basketuna vez colgara las zapatillas. Fuera de la cancha también lleva una vida ajetreada, ya que es padre de seis hijos. Sin embargo, esa enorme responsabilidad no le ha dificultado rendir sobre el parqué. De hecho, los nacimientos de sus tres primeros descendientes coincidieron con sus tres primeros campeonatos de Euroliga. Para el alivio del resto de clubes, el hechizo se rompió con el cuarto y no siguió sumando entorchados.

En cualquier caso, el nombre de Spanoulis quedará grabado en la historia del baloncesto europeo, tanto en la Euroliga como en Grecia, donde es amado y odiado a partes iguales desde que decidiera dejar el Panathinaikos para marcharse a su eterno rival. En el torneo continental, sus números no dejan indiferente a nadie. Máximo anotador histórico de la Euroliga con 4.412 puntos, mejor pasador con 1.557 asistencias, jugador con más minutos jugados (9.230) y tercer hombre con más partidos (350), tan solo por detrás de los 353 de Reyes y los 367 de Jankunas. Mañana contra el Baskonia seguirá engordando sus números en su partido 351.

cifras en Euroliga

Líder en anotación. Spanoulis es el máximo anotador histórico de la competición con 4.412 puntos, 260 más que el segundo en la clasificación, el español Juan Carlos Navarro.

Máximo asistente. El base del Olympiacos es también el líder histórico en asistencias, con un total de 1.577. El pase ha sido una de sus especialidades, además del manejo de balón y la capacidad de penetración hacia canasta. Le sigue en la tabla el barcelonista Nick Calathes, con 1.450.

Jugador con más minutos. A pesar de no ser el hombre con más partidos en el torneo -350 frente a los 363 de Jankunas-, sí es el que más tiempo ha permanecido en pista, con 9.230 minutos y 41 segundos.

Más valorado. Sus números anotadores y pasadores, además de su capacidad para estar bien colocado en los rebotes, sumados a su enorme cantidad de minutos, lo convierten en el jugador más valorado de la historia de la Euroliga, con un total de 4.133 puntos a lo largo de su carrera. Es decir, a una media de 11,81 de valoración por partido.