- Primera baja significativa en el Baskonia correspondiente a la temporada 2020-21. Shavon Shields se despedirá del club azulgrana este próximo 30 de junio cuando concluya la fase final de la Liga ACB en Valencia. Una noticia que sale a la luz a pocos días de afrontar el desafío del cuarto título doméstico de la historia y no redundará en nada positivo para la estabilidad del equipo. El alero estadounidense con pasaporte danés acaba contrato al término de esta temporada y ya tiene los días contados en el Buesa Arena. Su próxima parada profesional se encuentra muy lejos de Vitoria tras haber desoído cualquier canto de sirena procedente del club azulgrana para tratar de sellar una posible renovación.

Según desvelaron ayer los periodistas Chema de Lucas y Emiliano Carchia, el adinerado Armani Milan le acogerá en el futuro en una muestra más de que la entidad lombarda, pese a sus reiterados fracasos, sigue empeñada en tirar la casa por la ventana con el fin de buscar su espacio entre los grandes del Viejo Continente. La oferta transalpina con la que se venía rumoreando desde hace tiempo ha sido lo suficientemente jugosa como para alejarle definitivamente de la órbita del Baskonia, al que se le abre un escenario muy complicado a partir de ahora para retener a los mejores jugadores de su plantilla tras la sustancial pérdida de ingresos provocada por la crisis sanitaria. El primer espada que hace las maletas es Shields y uno de los próximos puede ser Tornike Shengelia, el gran emblema de los vitorianos con una ficha insoportable para las arcas.

Tras dos campañas donde ha dejado evidentes fogonazos de calidad pero sin llegar a la combustión plena ni tampoco erigirse en un exterior susceptible de marcar diferencias, Shields volará de nuevo en dirección hacia la Lega italiana, una competición que le resulta familiar tras su paso por el Aquila Basket Trento. En este modesto equipo donde se vio catapultado hacia la fama, dejó muestras de una excelsa voracidad ofensiva que como azulgrana no ha tenido una plena continuidad.

Y es que el tres nacido en Kansas, cuyo pasaporte comunitario era muy valioso para cumplir la legislación vigente en la Liga ACB, ha combinado notables actuaciones con otras en las que no ha sido ese jugador todoterreno capaz de manchar todos los apartados estadísticos. El Baskonia ya asumió hace tiempo que las posibilidades de mantenerle en nómina eran escasas, pero no perderá los derechos sobre él en el hipotético caso de que decida retornar en un futuro a España. El club incluirá a Shields próximamente entre los jugadores sujetos a derecho de tanteo, tal y como hizo los pasados veranos con otros inquilinos de su vestuario a los que trató de renovar (Shane Larkin, Darrun Hilliard, Johannes Voigtmann...).

A punto de cumplir los 26 años, el alero de 2,01 metros ha promediado esta campaña 9,8 puntos y 3,5 rebotes en la Euroliga. Sus números han sido algo mejores en la ACB con 11,7 tantos y 4,2 rechaces de media, aunque la percepción siempre ha sido que el Baskonia le contrató en su día para ser una pieza mucho más desequilibrante. Shields se embarca, por tanto, en un Armani que vuelve a tirar de talonario para tratar de mejorar sus discretos registros de los últimos tiempos. El gigante italiano ya ha reclutado al veterano Kyle Hines y, según todos los indicios, también sumará a su roster de la próxima temporada a Malcolm Delaney y Luigi Datome.

El club vitoriano le incluirá entre los jugadores sujetos a derecho de tanteo y así conservará sus derechos si vuelve algún día a España