vitoria - No se cumplen todos los días la friolera de 800 partidos en la ACB y Pedro Martínez, protagonista de esta indudable gesta, será uno de los grandes protagonistas del derbi vasco de esta tarde entre el Baskonia y el Bilbao Basket. Desde que debutase en la campaña 1989-90 con el Joventut, el catalán ha firmado una trayectoria intachable en los banquillos y se ha ganado a pulso la vitola de uno de los técnicos con más solera del baloncesto español. Tan solo el incombustible Aíto García Reneses, ahora en las filas del Alba Berlín alemán, le supera en esta estadística. De los que están en activo en el torneo doméstico, sin embargo, el hombre que ha cambiado por completo la inercia negativa del Baskonia es el que más encuentros acumula a una distancia considerable de sus perseguidores.
“Es un dato que, ante todo, reconoce muchísimo un camino largo con momentos de todo tipo. Son ya 28 años en esta profesión y estoy muy contento de este camino y de haber superado toda clase de adversidades. Ahora, con el paso del tiempo, le doy valor a mis primeros años de Manresa o a la temporada de Salamanca”, subraya de entrada el protagonista en declaraciones a la web de la ACB. El barcelonés, que ha dirigido en total a once equipos como Joventut, Manresa, Salamanca, CB Granada, Ourense, Gran Canaria, Estudiantes, Girona, Baloncesto Sevilla, Valencia Basket y Baskonia, este último en dos etapas distintas, ha dejado una huella intachable en casi todos los lugares.
Sin embargo, no fue hasta la pasada temporada cuando Pedro Martínez cosechó el éxito más sonado de su longeva carrera: la corona liguera con un conjunto valenciano que ni por asomo era un candidato a la gloria. “Todos los años ha habido situaciones, algún partido o una convivencia que la pongo al mismo nivel o incluso más alto que el título de ACB. Seguro que cuando pase más tiempo, lo valoraré mucho más”, confiesa el preparador azulgrana, relevado a orillas del Turia este verano por Txus Vidorreta y que se encontraba en el paro antes de recibir la llamada de Josean Querejeta para asumir las riendas del equipo tras la dimisión de Pablo Prigioni. - O. San Martín