vitoria - Apenas restan unos días para que la temporada arranque de manera oficial para el Baskonia y la escuadra de Zurbano desarrolló ayer su habitual jornada de puertas abiertas, que viene a servir de pistoletazo de salida para unos largos meses de duro trabajo. Una escena en la que la ilusión acostumbra a ser la nota predominante. Algo que se repitió también en esta oportunidad, pero aderezado con grandes dosis de ambición y confianza. Porque pese a las numerosas novedades que presenta el combinado azulgrana este curso -el más importante probablemente la identidad del inquilino del banquillo-, sus integrantes muestran una evidente seguridad en que el balance final pueda ser muy positivo. Y eso implica, evidentemente, luchar con los mejores por quedar lo más alto posible en todas las competiciones. Así se encargó de dejarlo claro uno de los veteranos del vestuario, Toko Shengelia, que estrena la capitanía del equipo. “Hay mucho talento en este grupo, también mucha experiencia y pienso que lo vamos a hacer bien este año. Jugamos tres competiciones y quiero ganar lo máximo posible. Creo que con la plantilla que tenemos, aunque es verdad que hay bastantes jugadores nuevos, con tiempo es posible ganar los títulos”, argumentó.

El georgiano no rehuyó la condición de peso pesado del vestuario teniendo en cuenta que inicia su cuarta campaña en Vitoria y, en este sentido, se mostró dispuesto a tirar del carro cuando sea necesario. “Yo siempre he tenido un grado de responsabilidad alto y ahora mismo sigue ahí. Como siempre voy a dar en la pista todo lo que tengo”, asumió. De este modo, no se mostró en absoluto preocupado por el hecho de que el club no haya fichado todavía a otro cuatro. “Mi responsabilidad siempre era y va a ser alta, da igual si soy el único en ese puesto o quién venga. Tengo que estar preparado para jugar todos los minutos que el equipo necesite” .

Shengelia se refirió también a la integración de los recién llegados. “Todo el mundo entiende el carácter Baskonia que hay aquí, que hay que ganar muchos partidos, jugar muy duro, ser profesional... Tampoco hace falta decirlo mucho porque hay un objetivo, que es ganar títulos”, significó. Respecto a la presencia de Prigioni en la banda, se mostró feliz. “Todo es positivo, me alegro de estar con Pablo como entrenador, tengo muchas ganas de empezar la temporada con él y me encanta jugar para él. Pide jugar correcto e inteligente y es lo que vamos a hacer. Hay que jugar inteligente, duro y rápido”, valoró. Por último, el georgiano optó por realizar una lectura positiva de que el primer compromiso liguero sea una siempre complicada visita al Barcelona. “No hay exámenes fáciles. Si no te preparas no hay exámenes fáciles. Hay que prepararse y darlo todo para poder ganar”, zanjó.

En parecidos términos se expresó Jayson Granger, quien destacó que si el Baskonia quiere estar arriba tiene que “ganar a cualquier equipo” y no importa “cuándo toque”. El base no escatimó halagos tampoco al nuevo técnico azulgrana. “Es un entrenador muy cercano que te escucha, te aconseja y te habla, y eso para un jugador significa mucho. Además conoce el juego como pocos y hay que aprovecharlo”, reseñó.

El uruguayo reconoció, eso sí, que la particular pretemporada que está completando el equipo, marcada por las ausencias, obligará a tener un poco de paciencia. “Ahora tenemos dos semanas para engrasar la máquina y corregir esos errores que hemos tenido. Tenemos que ser capaces de encontrar la química que nos haga ganar partidos”, destacó.