vitoria - En contra de lo sucedido la pasada temporada y en una decisión de lo más controvertida ante la evidencia del aterrador calendario que aguarda el próximo curso, el Baskonia confirmó ayer por boca de su director deportivo que tan solo restan “dos fichajes” para cerrar una futura plantilla que tan solo estará integrada por “doce jugadores” a expensas de lo que suceda con Adam Hanga, cuya continuidad en Vitoria es improbable ante la máxima tensión existente entre las dos partes después de la denuncia por impagos interpuesta por el alero magiar. “La plantilla será de doce, pero no descartamos alguno más. Estamos en pleno mercado y hay que ver cómo se define todo”, explicó Félix Fernández, quien incluyó en el roster al joven Luca Vildoza una vez acabada su cesión en el Quilmes.
Esas dos piezas restantes deberían ser por pura lógica un ala-pívot que complemente a Shengelia y un combo que actúe en los puestos de uno y dos, estando dicha plaza reservada para Jayson Granger. Eso sí, dicho boceto puede trastocarse de forma muy peligrosa si el Baskonia no consigue hacerse a la postre con los servicios del exterior charrúa, considerado jugador de formación y cuya negativa final para recalar en la NBA encendería todas las alarmas en las oficinas de Zurbano.
Respecto a Hanga, Fernández se mostró muy claro y, lejos de dar por segura su continuidad, dejó entrever que, en el caso de que llegue una interesante oferta por sus servicios, hará las maletas. “Tiene un contrato de tres años, es jugador del Baskonia y contamos inicialmente con él. Si llega una propuesta, siempre la hemos escuchado. En el deporte puede ocurrir cualquier cosa”, recordó el dirigente azulgrana, quien pasó por alto la áspera polémica reciente vivida entre el club y el húngaro. “Los dimes y diretes están ahí. Los comentarios son interesados y debemos mantenernos al margen. Estamos al día en los pagos con él y así ha sido notificado. No entramos a valorar este tipo de cuestiones”, señaló Fernández, quien por último desveló que el cuerpo técnico que rodeará a Pablo Prigioni en su bautismo como entrenador de élite podría quedar definido en un plazo de “entre siete y diez días”. - O.S.M.