vitoria - Restan únicamente dos jornadas para la conclusión de la primera fase de la Euroliga y el Baskonia todavía no conoce a la totalidad de sus posibles compañeros de baile en un Top 16 donde existen muchas probabilidades de que se ausenten varios clásicos del Viejo Continente al borde del precipicio. La clasificación del Maccabi y Emporio Armani se encuentra supeditada a poco menos que un milagro, mientras que el vigente campeón Real Madrid debe ganar sus dos partidos para evitar el sonrojo de una prematura eliminación.

El Laboral Kutxa ha cumplido con suficiencia en una primera fase donde apenas ha vivido sobresaltos y puede dejar casi sentenciada mañana su segunda plaza grupo si gana en el Abdi Ipekçi de Estambul. Junto a los azulgranas, ya han obtenido su pasaporte para la siguiente fase en el grupo B el Olympiacos y el Anadolu Efes. La última plaza parece reservada para el sorprendente Cedevita, al que únicamente una debacle privaría de sellar una clasificación histórica. La carambola que dejaría fuera a los croatas sería perder sus dos partidos ante el Armani -le vale incluso una derrota por menos de 9 puntos en su feudo del Drazen Petrovic- y el Baskonia, además de la victoria de los lombardos sobre el Limoges en el Mediolanum Forum en la última jornada.

Otros dos grupos también están prácticamente resueltos. En el C, ya han certificado su pase el Barcelona y el Lokomotiv Kuban -inmersos ambos aún en la pelea por el primer puesto-, además del Zalgiris. El cuarto pasajero para el Top 16 será, casi con total seguridad, el Panathinaikos, cuyo reciente triunfo ante los blaugranas ha supuesto el final de su pequeña agonía a lo largo de esta primera fase. Ganando esta semana al Stelmet Zielona Gora en el OAKA, los pupilos adiestrados por Sasha Djordjevic sellarán su objetivo de forma matemática dejando con las miel en los labios a los polacos y al Pinar Karsiyaka del exbaskonista Colton Iverson, cuyo papel estado finalmente muy lejos de las expectativas iniciales y apenas ha incomodado a los favoritos pese a su sonado éxito inaugural ante el Barcelona.

En el D, donde CSKA, Unicaja y Brose Baskets han impuesto su jerarquía, también permanece en el aire un único pasaporte. Sin embargo, todo hace indicar que el agraciado será un nuevo rico como el Darussafaka de Oktay Mahmuti. El Maccabi lo tiene prácticamente imposible pese a su reciente triunfo ante el Dinamo Sassari que ha alargado el suspense. Para llegar vivo a la última jornada, el cuadro dirigido por Zan Tabak necesita ganar este jueves en Tel Aviv al Brose Baskets y que el los otomanos sucumban en Moscú ante el CSKA.

Dando por sentado que esta combinación puede ver la luz sin muchos problemas, la aspiración no se presenta nada sencilla para el inquilino del Nokia Arena. Y es que en la última jornada debería ganar en Turquía al Darussafaka por más de 11 puntos, el margen por el que perdió (73-84) en su casa en la ida. Muy difícil, por no decir casi imposible, la empresa para un histórico de la competición que ha firmado hasta ahora un papel decepcionante y, salvo sorpresa, pasará a convertirse en uno de los grandes cocos de la Eurocup.

cábalas sin sentido Toda la emoción está centrada pues en el grupo A, donde únicamente se ha clasificado ya para el Top 16 el Fenerbahce y restán por adjudicarse las tres plazas que van del segundo al cuarto. Aunque parezca mentira a estas alturas, los cinco restantes conjuntos del lote albergan opciones matemáticas y dependen prácticamente de sí mismos. Varios duelos directos desenredarán el nudo, aunque el Real Madrid ya sabe que ganando en Munich al Bayern de Pesic y en la última jornada al Estrasburgo en el Barclaycard Center esquivará el sofoco de la eliminación. Aquí también sorprenden las apreturas del Khimki, una plantilla confeccionada en verano a golpe de talonario que se ha complicado la vida tras perder de manera consecutiva ante el Bayern y el Estrella Roja.

Cabe recordar que los dos grupos del Top 16 ya están determinados de antemano desde el momento en que se realizó el sorteo de la primera fase continental. Si el Baskonia es segundo o cuarto, dará con sus huesos en el E y se enfrentaría al primer y tercer clasificados del A -Fenerbahce y Bayern- y del C -Barcelona y Panathinaikos-, al segundo y cuarto clasificados del D -Unicaja y Darussafaka Dogus- y el segundo o cuarto de su mismo grupo (Anadolu Efes o Cedevita).

Si concluye tercero, ahora mismo le tocarían en suerte en el F el líder de su grupo en esta fase inicial (Olympiacos) y el del D (CSKA), los segundos y cuartos clasificados del A (Khimki y Estrella Roja) y del C (Lokomotiv y Zalgiris), y el tercero del D (Brose Baskets). Sin embargo, muchas posiciones pueden bailar en estas dos últimas jornadas, por lo que carece de mucho sentido realizar cábalas a estas alturas acerca de la conveniencia de caer en uno u otro grupo. El Top 16, que constará una campaña más de 14 encuentros y precede el cruce de cuartos previo a la Final Four, discurrirá entre el 29 de diciembre y el 8 de abril.

Diez clasificados. Fenerbahce, en el grupo A, Olympiacos, Baskonia y Efes, en el B, Barcelona, Lokomotiv Kuban y Zalgiris, en el C, y CSKA, Unicaja y Brose Baskets, en el D, han sellado su billete matemático.

Tres virtuales. Cedevita, Panathinaikos y Darussafaka lo tienen en su mano y únicamente una debacle les dejará fuera.

Tres plazas por adjudicar. El más comprimido es el grupo A, ya que los cinco equipos (Khimki, Bayern, Estrella Roja, Real Madrid y Strasburg) aún tienen opciones. Todos dependen de sí mismos.