Rimantas Kaukenas busca integrarse a marchas forzadas en el Baskonia pese a que ayer no pudiese vestirse de corto en el Eleftherios Indoor Hall ante el Panathinaikos. El club no le pudo inscribir a tiempo el miércoles antes de que se cerrara el plazo, pero el veterano lituano de 36 años ya es uno más a las órdenes de Scariolo. Mañana, solo unas horas antes del duelo liguero ante el Estudiantes, pasará el pertinente reconocimiento médico y podrá debutar con un conjunto al que se ha medido en infinidad de ocasiones durante su carrera cuando vestía la elástica del Zalgiris, Montepaschi o Real Madrid. Pese a ello, ya ha hecho sus primeras declaraciones públicas desde Chipre. "Estaba sin equipo porque las ofertas que surgieron no fueron interesantes para mí ni para la familia", reveló el exterior báltico, que ha suscrito un contrato de un mes de duración para minimizar las sensibles bajas de Kelati y San Emeterio en el perímetro. De su nuevo destino, que le permitirá seguir jugando "al más alto nivel" en la Euroliga, alabó la fortaleza de un nombre propio. "Tengo ganas de jugar con Nocioni tras enfrentarnos varias veces a nivel de selección. Es una bestia", resaltó.