Cuestión de oficio (87-83)

Con el croata a los mandos, los azulgrana han retomado el pulso a una Euroliga que parecía esfumarse de manera irremediable pero sus últimas actuaciones en liga son otro cantar.Sin embargo, los pupilos de Tabak parecen concienciados de que no pueden dejar escapar oportunidades. En otro encuentro para olvidar -como el de Donosti- en la mayoría de sus fases, el Baskonia sumó una nueva victoria que le aupa a la segunda posición liguera.

Para alcanzar este puesto dehonor -que comparte con Valencia, BIlbao y Herbalife-, los baskonistas hubieron de deshacerse ayer de un correoso UCAM Murcia. Los efluvios del encuentro contra el Anadolu Efes se plasmaron en las carnes de un Heurtel que volvió a su condición terrenal aunque intentara, en los primeros compases, reeditar su partidazo en Euroliga.

Salió al tran-tran el Baskonia, buscando en ataque, continuamente, la asociación entre el base galo y Lampe. Una sociedad impredecible. Dos jugadores de un talento brutal pero con una capacidad de concentración e implicación mediana. Reprochable en la élite. Así, los visitantes iban cogiendo confianza. Por la inconsistencia defensiva local, sobre todo, y por la escasez de recursos ofensivos de un Caja Laboral que se encomendaba, casi únicamente, a la lucidez -cuando la tuvo- de Heurtel.

Fueron los segundos diez minutos lo mejor de un partido mediocre. La grada se frotaba los ojos al ver de inicio a Taylor Rochestie. No verían, sin embargo, a un Cabezas inédito ayer. Heurtel tiene su titularidad ganada, a día de hoy, en este Baskonia, pero la segunda plaza para la dirección está en el aire. Rochestie, defenestrado por muchos desde que Tabak se hizo con las riendas del equipo, dirigió a los suyos como los ángeles en un segundo cuarto para enmarcar.

Le acompañó en esta sucesión de aciertos un Causeur que ha de mejorar en las grandes citas pero que cuenta, y mucho, para éstas, de requerimiento menor. Por su actitud, seguro que mejorará este aspecto. El compatriota del héroe de Estambul se fue al banco, debido a sus cuatro faltas en el tercer cuarto, con 18 puntos en algo más de 16 minutos y fue también en el segundo cuarto cuando sumó el grueso de esta estadística.

Un segundo periodo donde el Baskonia vapuleó al rival en los números pero no pudo plasmarlo sobre el parquet, lo que hubiera cerrado, prácticamente, el partido. Los locales vencieron en valoración por 44-8 durante estos diez minutos en los que los murcianos no sumaron de dos hasta el minuto 18 -la defensa fue, aquí sí, ejemplar-, pero sólo pudieron irse a los vestuarios seis arriba.

Tabak dejó en el banco en la reanudación a Rochestie y Causeur -los mejores hasta el momento- con el objeto, se entiende, de dosificar esfuerzos y que todos se sientan útiles en una plantilla con más posibilidades de las que se atisbaban hace unas semanas. Sin embargo, fue durante este cuarto cuando el UCAM se lo creyó y volvieron a ponerse arriba en el marcador. 69-70.

Poco dura la alegría en casa del pobre, suele decirse, y los azulgrana retomaron la cabeza en un suspiro. Sin embargo el UCAM no cejó en su empeño merced al partidazo de Berni Rodríguez y Antelo. El ex de Unicaja dejó bien patente que le sobra clase para competir en equipos de mitad de calse mientras que el gallego fue una amenaza desde el 6,75 y la pintura. Como Tillie. Ni Lampe ni Pleiss estuvieron ayer a la altura.

Y así siguió la cosa en un último periodo en el que Tabak volvió a alinear a Rochestie y Causeur. No obstantre, el primero no estuvo como en la primera mitad y el segundo se fue al banco por faltas. El Baskonia se la jugaba con los de siempre. La apatía de Lampe lastró a un equipo que pudo haberse evitado la angustia, pese a que el polaco sentenciara el choque. El oficio local pudo en los últimos minutos con un corajudo UCAM que a punto estuvo de dar la sopresa. Pero se ganó. Es lo que cuenta. Quinta victoria seguida, quinta superioridad en el rebote consecutiva.Ahora, a pensar en el Cedevita.