Vitoria. El Baskonia fraguó en el día de ayer uno de los partidos más completos de la temporada. Muchas voces se alzaron refrendando esta afirmación que, pese a la coyuntura que rodeaba al encuentro, se antoja revitalizadora para las almas baskonistas, algo alicaídas, de cara al play off que arrancará el 17 de mayo con un rival de sobra conocido y que lo será aún más: el Gescrap Bizkaia.

No obstante, Dusko Ivanovic restó importancia a todo ello apuntando al buen encuentro de los suyos como único asiento en el haber de su equipo dentro del gran choque firmado ante el Gescrap Bizkaia. "Lo importante, sobre todo, es empezar los cuartos bien" sentenciaba un Ivanovic sobrio como en su época más marcial, dejando a un lado las euforias que se le suponían al máximo responsable de un cuadro que ayer, en el Buesa Arena, encontró el norte que tanto había rastreado en este curso.

Lo encontró por medio de la plantilla prácticamente al completo. Todos rayaron a buen nivel en el cuadro baskonista aunque, posiblemente, haya que rescatar dos nombres en este sentido. El primero es el de un Nemanja Bjelica que firmó su mejor actuación como baskonista. Se atisbó ante los hombres de negro el jugador por el que Querejeta se desveló en su persistencia negociadora, el que hubo que arrebatar al todopoderoso Olimpiacos -flamante invitado a la Final Four de Estambul el fin de semana próximo- a base de billetera. Sus 17 puntos, con buenos porcentajes; 9 rebotes; 2 asistencias; y 2 tapones para una valoración de 25 puntos en poco más de 22 minutos conforman un auténtico halo de esperanza para el futuro a corto plazo del equipo.

La otra gran razón para la alegría en el día de ayer fue Fernando San Emeterio. El cántabro volvió a enfundarse la elástica baskonista y no se trató simplemente de una cuestión de recuperar sensaciones. En catorce minutos, 13 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias para 14 de valoración confirmaron la mejoría del trascendental exterior del cuadro azulgrana.

Esta buenas nuevas para la parroquia baskonista no hacen sino confirmar las opiniones de Ivanovic sobre el encuentro que puso, ayer, el broche a la temporada regular. "Para comenzar bien el play off hay que tener confianza y te la dan partidos como éste", explicaba. De eso no cabe duda. 100-70 y a esperar la sucesión de cruces que apeará a uno de los equipos vascos más pujantes -con permiso de un ascendente, en este último curso, Lagun Aro- de la pelea por el título de la ACB.

Si a algunos el encuentro de ayer les pareció descafeinado por la escasa recompensa -únicamente moral, en verdad- que aportaría al club de Zurbano, es difícil augurar qué pensarán del choque que les medirá el próximo 11 de mayo para dilucidar el segundo campeón de la Euskal Kopa. Cuestión de otorgar a la joven competición el valor que cada uno entienda.

A partir de entonces, no existirán las pruebas. Pese a que Ivanovic afirmara tras el encuentro de ayer que no tenía "importancia que el rival fuera el Gescrap", el equipo al que el Baskonia se medirá en su primera batalla de cara a conquistar su cuarto título de la ACB, lo cierto es que, en el subconsciente baskonista, existe un claro refuerzo moral por haber vencido con alta claridad a uno de los cocos azulgranas del pasado reciente. Sin embargo, Ivanovic matizaba su indiferencia hacia este hecho. "No es lo importante (haber ganado al Gescrap), lo importante es que hemos cumplido", incidía. Sólo importan los cuartos, ese es el mensaje.