vitoria. "Aquí sólo hay una persona que puede decirme lo que tengo que hacer y ese es Juan Roig. Nadie más, ni siquiera mi mujer. Si Juan Roig me llama y me dice: Pesic, quiero que juguemos una defensa en zona, mañana quedo con él y preparamos una zona para los play off. Pero sólo él puede hacer eso. Ni mi mujer puede". Los que pensaban que Dusko Ivanovic era el mayor devoto de la defensa individual en el colectivo de entrenadores europeos encontrarán un buen motivo para la duda en la rueda de prensa que Svetislav Pesic ofreció el pasado domingo tras vencer al Meridiano Alicante en un mal partido de sus jugadores.

Como los buenos relojes antiguos, el entrenador serbio apenas necesitó una sola pregunta de los periodistas para cojer cuerda y quedarse a gusto con una única respuesta de más de diez minutos. El horno no estaba para bollos. El técnico del Power Electronics Valencia acababa de mantener una acalorada y visible discusión con Omar Cook en pleno banquillo. Tras ser sustituido con un 24-9 en contra, el base recibió una estruendosa bronca de su entrenador. En lugar de agachar la cabeza, Cook se volvió para encararse con Pesic. Se sentó en su silla y se puso una toalla en la cabeza para cubrir su rostro. Craso error. El preparador serbio se acercó a él y le quitó la toalla de la cabeza para estamparla contra el suelo. La discusión acabó en ese momento. Al parecer, Cook había solicitado a su entrenador que planteara una defensa diferente para contener al Meridiano. El jugador norteamericano no debía saber aún que en el reino de Pesic, al igual que ocurre en Vitoria bajo las órdenes de Dusko Ivanovic, con las cosas de defender no se juega. Tal vez por eso, el actual entrenador taronja es ahora mismo uno de los principales candidatos a ocupar el banquillo del Baskonia la próxima temporada cuando, salvo sorpresa de gran magnitud, Ivanovic abandone el Buesa Arena tras haberse convertido por pleno derecho en un tótem para afición y club azulgrana. El montenegrino, hombre de familia, parece dispuesto a dedicar más tiempo a los suyos por circunstancias personales.

Ante esta tesitura, en el Buesa Arena siempre han pensado en Pesic como continuación natural en el banquillo. Igual de férreo, igual de exigente, igual de ambicioso. Sólo la posibilidad de que el Power Electronics Valencia pueda disputar la Euroliga la próxima campaña -para lo que necesitaría ganar la Liga este curso- podría retener en la Ciudad del Turia al exentrenador de Barça o Girona, que ha encontrado en Juan Roig, dueño del club valencianista, a un amigo además de su principal valedor. "Él nos paga para jugar en defensa. Está muy contento con nuestra defensa y está contento con mi trabajo y el del equipo. Si Juan Roig está contento, todo el mundo está contento", sentenció el domingo antes de apuntar con el rifle a sus pupilos. "En la primera parte hemos metido un triple. Yo, con 60 años, seguro que si intento ocho triples meto tres o cuatro, pero no puedo jugar en defensa", disparó. Ivanovic no podría haberlo dicho mejor.

una contienda por resolver A partir de esta jornada, el Caja Laboral inicia una persecución directa con el conjunto entrenado por Pesic. Las dos victorias cosechadas por los vitorianos en la fase regular (67-81 en La Fonteta y 72-65 en el Buesa) permite al Baskonia tener ganado el average particular entre ambos, por lo que un empate a victorias y derrotas les situaría por encima del Power Electronics. Ahora, a falta de cuatro jornadas para el final de la fase regular, los valencianos son terceros (21 triunfos y 9 derrotas) y los baskonistas cuartos (20-10). El reto no es sencillo. Los hombres de Ivanovic empiezan la contienda visitando Madrid este fin de semana para después recibir al Blancos de Rueda Valladolid, viajar a Badalona y terminar en Vitoria con el Lagun Aro. El Power afronta dos partidos seguidos lejos de su feudo -Estudiantes y Gran Canaria- tras enfrentarse primero este domingo al Unicaja. Su último partido será en Valencia frente al Assignia Manresa. La suerte está echada.