l año pasado, las calles Bulevar de Mariturri y Clara Campoamor, en Zabalgana, se llenaron del ruido de tambores en una tamborrada que venció al confinamiento y logró unir balcones. El promotor de esta idea, Iván Usobiaga -conocido como Uso en la sociedad gastronómica Azkenean y en la cuadrilla de blusas y neskas Jatorrak- fue quien contactó con Ana Isabel Bravo, que trabaja en la banda y en la escuela de música municipales, y que enseguida se puso a preparar los ensayos para que todos aquellos vecinos que lo desearan se sumaran a tocar en sus ventanas para que el clásico suena el tun tun/ y con él la trompeta/ es la retreta de nuestro patrón llegase lo más lejos posible.

Ensayos para la tamborrada de San Prudencio en los balcones de Zabalgana

Ensayos para la tamborrada de San Prudencio en los balcones de Zabalgana

En esta ocasión, y tras el fallecimiento en el mes de octubre de Uso, los vecinos han querido volver a salir, algunos al patio y otros aún desde sus ventanas y balcones, para homenajear al vecino que, en tiempos de confinamiento, consiguió sacarles una sonrisa y unir a grandes y pequeños en una de las grandes pasiones de este alavés; la tamborrada.

Bravo ha vuelto a hablar con DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA para explicar cómo se han organizado para esta cita y lo que les ha llevado a tomar la decisión de repetir este año la tamborrada en honor a Uso. "Como excusa con los aplausos, el año pasado empezamos a salir a pinchar media hora antes, y a raíz de eso Iván, que sentía mucha pena de que no se hiciera la tamborrada, me lo propuso", recuerda. Y es que Uso llevaba años saliendo en la tamborrada, y aquella ya era una cita ineludible para él.

El éxito cosechado el pasado año, en el que los vecinos se volcaron e incluso ensayaban en sus ratos libres, llevó a Uso a proponer que se repitiera este San Prudencio. "Nos dijo que él no podía comprometerse para el 27, pero que teníamos que mirar cómo caía el 25 o 26 y hacerlo en la calle y yendo de bares. Por eso, decidimos que teníamos que hacerlo". Esto es lo que les ha llevado a coger el testigo y organizar esta nueva tamborrada, este homenaje para Iván.

Los vecinos tenían claro que querían hacer algo y, algunos desde el balcón y otros desde el patio, este año los tambores resonarán por Iván. Debido al coronavirus, han solicitado ya un permiso para poder reunirse. "Hemos pedido un permiso de concentración en la Ertzaintza, y nos hemos comprometido a poner marcas para que haya distancia entre los que estamos", anuncia Bravo.

De esta forma, teniendo en cuenta esas medidas de seguridad que aún siguen vigentes, van a hacer tres toques: a las 18.00, a las 19.00 y a las 20.00 horas, "respetando un poco que en Vitoria el día 27 iban a hacer algunas cosas a las 21.00 horas". Además, comenta que él era poteador, y manteniendo las restricciones, los vecinos que estén tocando abajo se tomarán "cuatro vinos" en su honor y seguirán tocando. Ellos ya adelantan que en esos tres toques van a tocar recordándole, y en el último toque, además de la retreta y la diana de tambores, harán el Txoria Txori, "que era como nuestro himno del confinamiento cuando acababan los aplausos y será, está claro, para Iván", añade asimismo Ana Isabel.

Esta canción, además, "le encantaba", y la cuadrilla de blusas y neskas Jatorrak también le homenajeó con ella. Quienes le conocían lo recuerdan por ser también presidente de un club alavés de tiro con arco y por su pasión por la gastronomía.

"Esta va a ir por él, y ojalá esta se quede como una iniciativa en Zabalgana", añade además Bravo, que resalta que "siempre habrá un recuerdo para Iván, que fue el precursor de esta cita".

Las fachadas de Zabalgana volverán a engalanarse, por tanto, como lo hicieron el pasado año, cuando grandes y pequeños se pusieron sus gorros de cocineros y en las terrazas del vecindario de Iván colocaron velas, y en las ventanas de las habitaciones del bloque de Ana colgaron sábanas con el típico caracol de San Prudencio dibujado.

En esta ocasión, los participantes están ya ensayando desde sus casas porque tienen los tutoriales del año pasado, y Ana Isabel va a reunir a seis vecinos como referencia en el jardín de otra vecina. Además, siendo en la calle, ella está avisando a los amigos de Uso para que se pasen por allí y le den este agur desde el barrio. "Se lo debemos a Iván", resume finalmente Bravo, que este año reconoce que la tamborrada tendrá un significado diferente.