La pandemia pasa factura también al medio de transporte público más utilizado en nuestro territorio. Así, el número de viajeros declarados que pasaron por la estación de autobuses de Vitoria pasó a casi la mitad en los primeros ocho meses de 2020 según han informado fuentes del Ayuntamiento. Tras un incremento de más del 5% en febrero, las cifras se desplomaron en marzo con la llegada del covid-19. De esta manera, con tan solo alrededor de 950.000 viajeros este número presenta una reducción de casi el 50% con respecto al año pasado.

Esta caída de pasajeros vino acompañada de otra en el número total de autobuses que circularon por la parada. Entre enero y agosto del año pasado pasaron cerca de 87.000 autobuses, casi un 30% menos que en el año anterior. El peor mes para la terminal fue sin duda abril con un tráfico de apenas 4.000 vehículos de este tipo.

Asimismo, por esta misma central gasteiztarra pasan los más de mil estudiantes que utilizan cada día los autobuses que conectan Bilbao y Vitoria de la Asociación Universitaria Altube para llegar a sus centros de estudio. A pesar de no tener cifras concretas, fuentes internas de la asociación reconocen que el número de pasajeros ha disminuido desde el comienzo de la pandemia, por lo que han reducido el número de servicios diarios. Los estudiantes que más sufren las consecuencias del virus son aquellos que viajan a primera hora ya que estos son los servicios más frecuentados y el aforo máximo se ha mantenido igual que el de antes de la aparición del coronavirus.

Desde la asociación son conscientes de que muchos de los viajeros sienten respeto e incluso miedo al verse obligados a compartir un espacio cerrado con hasta 69 personas. "Claro que les da miedo ir en autobús, pero si tienen que ir tienen que ir", afirman desde Altube. Por otro lado, aseguran que todo lo que hacen está dentro de la legalidad y que incluso han tomado medidas sanitarias como la desinfección de los vehículos al final del día.

Por el contrario, Bea Temprano, vecina de Vitoria y usuaria habitual de la asociación Altube, afirma que la actitud de los pasajeros es similar a la que tenían el año pasado y que la única diferencia que percibe es el uso de la mascarilla. "La gente va demasiado tranquila, como si no pasase nada. Por no haber no hay ni gel desinfectante en el autobús", dice.

En cuanto a las líneas forales de Alavabus, los servicios volvieron al 100% de su actividad en junio del año pasado con medidas como el bloqueo de la primera fila de asientos y el acceso al vehículo por la puerta trasera. Sin embargo, la recuperación total sigue lejos.

En el caso del transporte foral, el número de usos diarios ha ido creciendo desde el confinamiento que tuvo lugar en marzo. Con alrededor de 30.000 usos diarios en diciembre de 2020 las consecuencias de la pandemia son evidentes al compararlos con los casi 60.000 que había al comienzo del mismo año. Por último, el número de usuarios totales de el servicio de transportes urbanos de Vitoria Tuvisa en el año 2020 fue tan sólo de 8.238.327, cifra que supone un descenso de un 49,17% respecto a las del año 2019 y representa una disminución de casi 8 millones de personas.

Los 950.000 viajeros que pasaron por la estación de autobuses de Vitoria desde enero hasta agosto suponen una reducción del 50% respecto al año pasado.

Las líneas forales de Álava se encargaron de la mitad de transportes que en enero.

Usuaria habitual de la asociación Altube.