- El Ayuntamiento de Gasteiz informó ayer de que ha abierto diligencias preliminares para comprobar lo que se afirma en la denuncia administrativa recibida en sede consistorial en la que siete voluntarias de la perrera denuncian por escrito mobbing y abusos sexuales desde 2018, situación de la que -dicen- alertaron sin éxito a los jefes del centro. Además, el Consistorio ha trasladado el caso a la Fiscalía.

La investigación se puso en marcha para decidir si son ciertos los hechos recogidos en el escrito y actuar en consecuencia. Es la información que ayer dio el concejal Iñaki Gurtubay al resto de corporativos en la reunión convocada al mediodía. La denuncia comunica al Consistorio unos supuestos hechos que se atribuyen a un trabajador del centro de protección animal de Vitoria.

Aclara el gabinete Urtaran que las personas que se han dirigido al Ayuntamiento no lo han hecho como asociación ni en representación de Apasos sino a título particular. "Conocido este escrito, la labor que corresponde al departamento de Recursos Humanos es comprobar la veracidad de lo que se afirma en el papel", señalan fuentes municipales. Investigación que puede o no desembocar en la apertura de expediente al trabajador. Se ha citado a declarar a las personas que suscriben el escrito, pero hasta la fecha no han querido comparecer. En el marco de la investigación municipal, el Ayuntamiento nombró instructora y secretaria de las diligencias previas siguiendo el procedimiento habitual de las administraciones. En esta fase previa, el objetivo era aclarar si el funcionario denunciado cometió alguna infracción. De forma preventiva y provisional se le trasladó a otro departamento municipal hace dos semanas después de recibir la denuncia.