La familia Lumbreras, protagonista en Montilivi

Natalia y Rebeca Lumbreras presenciarán en directo este sábado el duelo de Montilivi. Pero no lo vivirán como cualquier otro espectador que se acerque a dicho campo para seguir el encuentro entre el Girona y el Deportivo Alavés.

Para ambas, será un partido especial que quedará grabado para siempre en sus memorias. Al mismo tiempo no pasarán desapercibidas. Y es que sobre el césped estarán sus respectivos hijos y, a la vez, sobrinos.

Desde este viernes se encuentran en la ciudad catalana junto a sus maridos para disfrutar y, al mismo tiempo, sufrir con lo que pase en el césped.

Hugo Rincón Lumbreras y Pablo Ibáñez Lumbreras se enfrentarán por primera vez siendo primos. Tantas reuniones o vacaciones familiares juntos a lo largo de estos años para este sábado durante noventa minutos rivalizar en busca de tres puntos más para sus respectivos equipos.

Valtierra, el nexo de unión

Valtierra es el nexo de unión de la saga Lumbreras. En dicha localidad empezó el lateral derecho cedido por el Athletic al Girona a dar sus primeras patadas hasta que Osasuna le reclutó cuando tenía diez años para ir a entrenar a Tajonar dos días por semana. Entonces pasó definitivamente a la cantera del club rojillo, donde permaneció durante cinco cursos.

Luego el Athletic Club ficharía a Hugo Rincón en edad cadete en 2018 para seguir macerándole hasta llegar el pasado ejercicio al fútbol profesional con su cesión al Mirandés, donde se destapó como un potente carrilero llegando incluso a estar en la agenda de Sergio Fernández para su posible aterrizaje en el Glorioso.

Casualmente cuando el actual futbolista del Girona ingresó en la cantera osasunista salió de allí su primo. Pablo había llegado en fútbol-8. Era entonces infantil cuando no pasó el corte y ni tan siquiera pudo seguir su progresión en el cuadro pamplonica. Se fue a la Mutilvera, el club de su localidad natal y años después firmó por el San Juan.

El ahora centrocampista del Alavés hizo una buena mili futbolística y es que tras regresar al conjunto de Mutilva unos meses, Osasuna lo firmó de nuevo, ya para su filial. Ahí mostró entonces sus cualidades el pulmón de Coudet en la sala de máquinas hasta llegar al primer equipo de la mano de Jagoba Arrasate.

Después, su habitual regularidad en El Sadar y el poco reconocimiento que encontró en la actual directiva durante el proceso de renovación motivaron que el pasado verano llegara a Mendizorroza.

Por encima de todo, amigos

Este sábado rivales, pero por encima de todo primos y amigos. Como quedó constatado el 4 de abril de 2023, cuando Pablo Ibáñez marcó en San Mamés ante el Athletic un soberbio gol en la prórroga recibiendo posteriormente de Hugo un entusiasta abrazo, cual si fuera compañero suyo de equipo.

Ambos tienen junto a su otro primo, Manu Onwu, un grupo de whatsapp donde se comunican habitualmente. El que fuera también futbolista de Osasuna durante una temporada es el mayor de los tres y el que más consejos por su experiencia puede darles en estas horas previas al duelo de Montilivi.

El caso es que pase lo que pase este sábado, la alegría de unos no será tanta por la mayor decepción de los otros. Los Ibáñez Lumbreras muestran su preocupación por el hecho de que el Girona no termina de arrancar y se muestran más comprensivos de lo normal ante una posible victoria local. Ahora son alavesistas, pero una parte de su corazón entiende las urgencias que Hugo y sus compañeros tienen actualmente.

Cierto es que han intentado durante la semana llevarlo con la mayor naturalidad posible, pero llegado el momento es lógico pensar que los sentimientos aflorarán. Lo normal sería pensar que son tres puntos más, pero dadas las circunstancias tampoco es del todo así.

Una connotación especial

No cabe duda de que para toda la familia no es un partido cualquiera. El destino ha querido que por primera vez Hugo Rincón y Pablo Ibáñez se enfrenten en un campo de fútbol. Resulta del todo inusual que dos familiares directos estén a un lado y otro de un terreno de juego, pero este sábado se dará dicha situación en Girona.

Por ello, Natalia y Rebeca, las hermanas Lumbreras, lo vivirán de otra manera. No será como otros encuentros que han visto hasta ahora del Girona o del Deportivo Alavés. El partido de los primos tendrá una connotación especial para todos ellos.

Eso sí, cuando suene el silbato del árbitro por última vez la familia estará ahí de nuevo, contando los días para reunirse otra vez en la casa de Valtierra y hablar de lo cotidiano y del duelo de este fin de semana de Montilivi.