"Mi responsabilidad es la misma paguen seis millones, tres o uno por mí"
Aunque sigue sin estar al cien por cien físicamente, Lucas Boyé cada día se siente mejor de la rodilla y solo piensa en serle lo más útil posible al Alavés, sea dentro o fuera del campo
A Lucas Boyé no le pesa la etiqueta de “fichaje más caro” en la historia del Deportivo Alavés. El delantero argentino tiene claro que ha llegado a Mendizorroza para dejarse la piel como uno más y ayudar al club babazorro a alcanzar sus objetivos, que no son inamovibles. Aunque la permanencia sigue siendo la prioridad, el ariete sueña —y se ilusiona— con dar ese paso más del que tanto se ha hablado desde el inicio de la temporada.
“Pablo Aimar me marcó mucho, y eso que solo coincidimos unos meses”
¿Qué tal la rodilla? ¿Alguna molestia durante este mes?
La verdad es que no, me he sentido bastante bien. Sí es cierto que me costó volver a arrancar, estuve un poco estancado, pero ya hace dos semanas que empezó a rendir mejor la rodilla. Me falta aún, eso sí, para estar al cien por cien.
Lo comentó en su presentación, pero fue una situación curiosa llegar a un nuevo equipo estando lesionado, ¿no?
Sí, dudo que haya habido muchos casos como el mío. De todas formas, yo creo que lo importante es valorar el contexto. Hubiera tenido poco sentido cancelar el fichaje por un contratiempo de un mes, menos todavía teniendo en cuenta que iba a firmar por varios años.
El Chacho ha confiado en usted desde el principio: bastantes minutos en el debut y tres titularidades desde entonces.
Estoy muy agradecido por ello. Siempre es lindo iniciar, jugar y tener participación. Es algo que motiva y que, por supuesto, estoy intentando aprovechar lo máximo posible.
¿Se esperaba tanto protagonismo?
Era un tema incierto. Hasta el debut en San Mamés, yo no sabía realmente cuándo iba a estar listo para el Chacho. Tú puedes entrar en la convocatoria y que el míster no te vea preparado. O puedes tener el alta médica y que tu rodilla, en realidad, no te permita estar más de dos minutos sobre el césped. Por fortuna, pude entrar rápido en la dinámica.
“Toni y Mariano me parecen dos jugadorazos; ya los conocía, pero al verlos de cerca me han sorprendido todavía más”
¿Le está influyendo en algo el hecho de haber sido el fichaje más caro de la historia del Alavés?
No, no. Evidentemente, le doy valor a la apuesta que hizo el club y la confianza que depositó en mí, pero mi responsabilidad, que es dejarme la piel, no va a cambiar por que paguen seis millones, tres o uno por mí. Además, en el fútbol actual, con los montos yendo hacia arriba cada año, lo normal es que dentro de no mucho venga alguien que supere la cifra de mi traspaso.
¿Cómo valora el desempeño del Alavés hasta el momento?
Estoy muy contento con el rendimiento del equipo. Te diría, incluso, que me siento ilusionado. Siendo parte del día a día de este grupo, veo un potencial enorme y ojalá podamos seguir haciendo partidos como el anterior contra el Elche. Mantener ese nivel y, por qué no, intentar mejorar.
¿Y el suyo personal?
Lo que te he dicho al principio. Sin sentirme todavía al cien por cien de la rodilla, diría que estoy satisfecho con lo hecho en este mes y medio. Sé que el tiempo y el trabajo, según avance mi adaptación, me harán mejorar. Ante el Athletic, en el debut, estaba muy lejos de sentirme cómo quería, mientras que, frente al Elche, ya me vi más cómodo sobre el césped y encima pude marcar. Ahora solo espero que lleguen más goles y que con ellos pueda ayudar al equipo.
¿Coincide, como han dicho otros compañeros, en que se puede dar un paso más?
Bueno, debemos tener claro cuál es nuestro objetivo. Primero hay que conseguir una base de puntos que nos permita asegurar la permanencia. Si cumplimos, podremos soñar y aspirar a otras cosas. Eso no quita, como he dicho antes, que yo esté muy ilusionado y que piense que tenemos una gran plantilla. Contamos con jugadores de mucho nivel en todos los puestos.
Tanto en el Elche como en el Granada, hablando en Primera, siempre estuvo ahí en la lucha por la salvación, no estaría mal un año tranquilo en ese sentido.
Eso espero. Poder mirar más hacia arriba que hacia abajo es una buena señal y ojalá sigamos así la mayor parte de la temporada.
¿Llega a agotar el hecho de, cada curso, vivir con esa tensión que supone pelear por no bajar?
Desgasta lo justo, te diría. Pero no solo por lo que te compete a ti, sino porque te obsesionas con cosas que no puedes controlar. Empiezas a mirar qué hacen los rivales, a calcular posibles resultados… Y eso agota mentalmente.
¿Cómo se maneja usted, a nivel mental, en situaciones límite?
Supongo que bien. Intento no dar mayor importancia a unos partidos que a otros, trato de jugarlos con la misma mentalidad sean de la primera jornada o de la última. Así me evito pensar de más.
Relacionado con lo anterior, ¿qué rol tiene en el vestuario actualmente? Es de los que habla mucho, prefiere escuchar…
Nunca he sido muy hablador. Mi personalidad es más bien tímida, callada. Pero sí es cierto que, cuando ya vas cumpliendo años y cogiendo experiencia, puedes aportar algunas cosas desde ahí. Tampoco es demasiado necesario en este grupo. Tenemos jugadores con liderazgo y largo camino en la élite que saben llevar el vestuario. Mi rol es el de ayudar donde toque, sea dentro o fuera del campo.
“Ojalá todas aficiones entendieran lo mucho que ayuda al equipo que le empujen como hace la del Alavés”
¿Qué le parece la idea de juego de este Alavés? ¿Piensa que le viene bien a su propio perfil de delantero?
Me gusta y creo que encajo bien en ella, sí. Somos un equipo que quiere mucho el balón, lo cual no suele ser habitual entre quienes tienen nuestros, y eso hace que los delanteros toquemos mucho el balón, que nos sintamos protagonistas.
Dijo Carlos Vicente esta semana que ese protagonismo les daba confianza, ¿es así?
Obvio, más todavía cuando les quitas el balón a equipos que, a priori, son candidatos a dominar la posesión. Esa capacidad hace que uno se crezca, que se sienta con más opciones de ganar. Y lo mental es fundamental en el fútbol.
¿En qué aspectos considera que hay mayor margen de mejora?
Pienso que en el gol. Hemos generado mucho más de lo que hemos convertido, y eso nos puede lastrar en algunos partidos. Si no me equivoco, hasta el partido ante el Elche no habíamos marcado más de tres tantos.
¿Cómo está viviendo esa competencia en la punta de lanza?
Muy bien, la verdad. Siempre es lindo tener a mucha gente compitiendo por un puesto, pues eso hace que quien juega no se relaje nunca. Si sabes que el de al lado se deja todo cada día, tú no puedes hacer menos, elevando el nivel del grupo. Luego, en lo personal, tanto Mariano como Toni son dos jugadorazos. Ya los conocía; pero, al verlos de cerca, me han sorprendido aún más.
Ya había jugado en Mendizorroza antes de fichar por el Alavés, ¿cambia mucho el hacerlo como local?
Demasiado. Ojalá todas las aficiones entendieran lo mucho que ayuda al equipo que le empujen como hace la del Alavés. A los jugadores nos da un plus, y así lo sentí yo ante el Elche. Es muy lindo jugar en casa.