A falta de que en las próximas semanas concluyan los play off de ascenso y descenso de las respectivas categorías y por ende se puedan perfilar los diferentes grupos en la 2ª RFEF, sí es evidente que la dificultad que tendrá la campaña venidera para el filial del Deportivo Alavés va a ser mayor que la de los dos últimos cursos.

La pérdida de categoría de históricos como Real Unión, Amorebieta y Sestao elevará sobremanera el nivel de complejidad que el Alavés B se encontrará a partir del mes de septiembre. Clubes que han militado hasta el pasado fin de semana en la 1ª RFEF con jugadores expertos, pero que pese a ello han descendido y que sin duda parten como favoritos para ocupar alguna de las primeras cinco plazas que dan derecho a soñar con cosas mayores.

Cierto es que sufrirán cambios en su composición de plantilla, pero la disposición económica de estos tres clubes será notable y podrán aspirar a futbolistas que a priori marcarán la diferencia en un grupo II que en los últimos años ha sido más bien flojo.

El cuadro verdinegro seguirá contando con el apoyo de Sidenor como patrocinador y sin duda que sus posibilidades de mercado se dejarán notar. Lo mismo que el Real Unión. La entidad fronteriza tiene a Unai Emery como máximo valedor, además de la colaboración que a muchos niveles le presta el propio Aston Villa. Este ejercicio, por ejemplo, dos de sus integrantes han sido cedidos por la entidad inglesa.

Tal vez el más limitado de los tres sea el conjunto de Urritxe. Dirigido por el vitoriano Natxo González desde la décima jornada, el Amorebieta no ha podido lograr la permanencia tras unos años en los que incluso ha militado en el fútbol profesional. Pero sus limitaciones a nivel económico y sobre todo de instalaciones le han terminado por pasar factura y está por ver qué proyecto tienen pensado poner en marcha en los próximos días.

Ojo al Logronés y Basconia

Todo ello sin olvidar la continuidad de la UD Logroñés, que con Félix Revuelta al mando a buen seguro vuelve a apostar por jugadores de cierto caché para lo que es la cuarta categoría del fútbol español. Pese al fracaso de no haberse clasificado tan siquiera para disputar esta vez la fase de ascenso, el cuadro de Las Gaunas volverá a ser competencia para muchos de sus contrincantes a la hora de acudir al mercado.

El atractivo de militar en un club de renombre, con una atractiva y recién estrenada ciudad deportiva y jugar en dicho estadio son alicientes como para captar elementos que a otros contrincantes pudiera costarles mucho más.

A ellos se les suma el recién ascendido Basconia. El segundo filial del Athletic a buen seguro que no será un invitado más en su debut en la categoría. Formado por un elenco de jóvenes jugadores, tratará de elevar el nivel futbolístico con el fin de ser la sorpresa del grupo y de paso seguir surtiendo al segundo bloque rojiblanco.

Pero por encima de todo ello, las prestaciones del Alavés B deberán ser otras desde el inicio. No puede permitirse un comienzo tan errático como el perpetrado en la temporada recién acabada y que luego ha ido lastrándole durante el resto del campeonato.

La base de ello pudiera ser el buen final que ha protagonizado el Miniglorias en los meses anteriores y el hecho de seguir contando con el mismo entrenador (Molo Casas) debe ser una ventaja más que otra cosa.

El objetivo inicial ha de ser estar entre los cinco primeros al menos. Por presupuesto y posibilidades de mercado es lo que se le debe exigir al segundo equipo vitoriano. A expensas del plantel que se conforme, cuenta con una base sobre la que cimentar el nuevo proyecto con el que pelear sin complejos contra entidades históricas y de nombre del fútbol vasco.