La multitudinaria pelea entre aficionados del Real Valladolid y el Alavés en los prolegómenos del encuentro del pasado domingo se saldó con un total de 45 actas levantadas a aficionados vitorianos.

Si bien se habían vendido a través del club del Real Valladolid un total de 595 entradas al Deportivo Alavés para sus aficionados, posteriormente se tuvo constancia de que más de 700 entradas habían sido adquiridas por seguidores del equipo albiazul a través de Internet o bien por cesión de aficionados del Real Valladolid, aclara la Subdelegación del Gobierno a través de un comunicado.

Por estas circunstancias acudieron al encuentro cerca de 1.400 aficionados del Glorioso, muchos de ellos se desplazaron mediante vehículos particulares.

Según la Policía, un grupo de unos 45 aficionados protagonizaron un altercado frente a un bar en el que se suelen reunir aficionados del Real Valladolid en la calle Barbecho de Valladolid. El grupo de la afición visitante arrojó botellines y otros efectos a los aficionados locales, que tuvieron que refugiarse a la carrera en el interior del establecimiento.

Al lugar acudieron varios indicativos de Policía Nacional y de Policía Municipal, que procedieron a identificar y embolsar a este grupo de aficionados. Por este altercado se propuso a los 45 aficionados a sanción por actas por la Ley del Deporte.

A partir de ese momento se acompañó y controló a este grupo de individuos por indicativos de Policía Nacional y Policía Municipal durante todo el partido y hasta que abandonaron la ciudad.

Posteriormente durante el encuentro, se procedió a levantar otras diez actas a aficionados del Alavés, ocho de ellas por la Ley del Deporte y dos actas por Ley Orgánica 4/2015. Los motivos que las propiciaron fueron embriaguez y desobediencias entre otros. El dispositivo se saldó sin ningún detenido