Sabedor de los resultados de sus rivales directos, el Deportivo Alavés se encontró en La Cerámica con una oportunidad única para mejorar su condición en la batalla por el ascenso, pero no la aprovechó. Los albiazules se mostraron erráticos durante todo el encuentro y apenas generaron ocasiones para hacer frente al único gol (Del Moral) del Villarreal B, quien perdonó al contragolpe en la segunda mitad (1-0). 

En lo que respecta al once inicial, la realidad es que, ante la cantera groguet, las novedades brillaron por su ausencia. Solo hubo una y esta, además, fue obligada por la sanción de Abdel Abqar, cuyo puesto lo terminó ocupando Víctor Laguardia. Había dudas de si el elegido sería el central maño –demasiado ausente en liga– o Nikola Maras y, al contrario que en anteriores ocasiones, Luis García optó por brindar la titularidad al primero de ellos. 

El choque, por su parte, siguió desde el principio la línea que cualquier aficionado se hubiera imaginado. Los babazorros, conscientes de las fortalezas y también debilidades de su rival, cedieron la iniciativa del juego al filial del Villarreal y, aunque alternaron su férreo bloque bajo con momentos de presión alta, lo cierto es que se mantuvieron replegados en su campo la mayor parte del tiempo, esperando así su oportunidad para morder.

Y esto último, a diferencia de la jornada anterior, no se hizo de rogar demasiado. A los cinco minutos de partido avisó Jason, que se plantó dentro del área gracias a un desplazamiento en largo que pilló desprevenida a la zaga amarilla, y más tarde remató Sylla una interesante jugada combinativa. El resultado, sin embargo, se mantuvo invariable y esto permitió que el conjunto local tuviera su opción para tomar ventaja.

Cuando los groguets minimizaron sus errores atrás y fueron más verticales en ataque, lo cual ocurrió, curiosamente, en el momento que cedieron ligeramente la posesión, el Alavés empezó a sufrir más de lo esperado y cometió un error que le costó marcharse al descanso por detrás en el electrónico. Algo, cabe mencionar, bastante inesperado teniendo en cuenta que, hasta entonces, los acercamientos más peligrosos habían sido los suyos.

En concreto, fue Del Moral el encargado de abrir la lata. Cerca de la primera media hora de juego, el manchego atrapó en la frontal un mal despeje de Blanco y, pese a que remató muy mordido, pudo superar a Sivera (1-0) después de que el balón tocara en Sedlar. A raíz de los anterior, a lo que hay que añadir un chut posterior de Lozano, el Glorioso se marchó al descanso con mal sabor de boca, consciente de que podía haber hecho más. 

Para tratar de cambiar esa sensación, Luis García decidió agitar el árbol y, en consecuencia,  el Alavés arrancó la segunda mitad con dos novedades entre sus filas. Alkain ocupó el sitio de Jason, muy desaparecido salvo por su mano a mano en el inicio del encuentro, y Asier Villalibre formó en la punta del ataque en lugar de Sylla,  quien también pasó desapercibido al no poder explotar su velocidad al espacio.

El planteamiento, no obstante, pudo haberse ido al traste muy pronto. A los 52 minutos, el delantero Millán fue derribado por Tenaglia cuando se disponía a encarar a Sivera y el colegiado, Milla Alvéndiz, no dudó en expulsar al argentino. Afortunadamente, el VAR anuló la jugada por un fuera de juego casi milimétrico del jugador groguet y, de esta manera, los babazorros mantuvieron la igualdad numérica en La Cerámica.

Ese susto, eso sí, no fue el único. Y el protagonista, además, fue el mismo. De manera inexplicable, los gasteiztarras dejaron completamente descubierta su espalda y el Villarreal B, inteligente al contragolpe, castigó cada error como si su ventaja fuera mucho más amplia y al partido le quedase el tiempo de descuento. Millán, en dos ocasiones, aprovechó su velocidad para pisar el área y solo le faltó más picardía para batir al guardameta albiazul.

Ahora bien, lo más preocupante no fue que los groguets perdonaran tanto, sino que el Alavés se mostrase inofensivo en ataque. Ni siquiera las entradas al césped de Miguel, que permitió cambiar el sistema a un 4-4-2, Salva Sevilla o Arroyo generaron esa chispa o reacción necesaria para poner en apuros a la retaguardia local. Únicamente Villalibre dispuso de una posición favorable, pero no logró rematar.

FICHA TÉCNICA:


Villarreal B (4-4-2): Álvarez; Leal, Dela, Íñiguez, Tasende; Carreira, Del Moral, Carlo, Lozano; Fer Niño y Millán.

Deportivo Alavés (4-2-3-1): Sivera; Tenaglia, Laguardia, Sedlar, Duarte; Blanco, Toni Moya (Salva Sevilla, 56’); Jason (Alkain, 46’), Guridi (Miguel, 56’), Rioja; y Sylla (Villalibre, 46’).


Goles: 1-0: Del Moral, 29’.

Amonestaciones: El colegiado Milla Alvéndiz amonestó a Tasende e Íñiguez en el Villarreal B y a Duarte, Laguardia, Blanco y Salva Sevilla en el Alavés.


Estadio: La Cerámica.

Asistencia: 2.026