Una semana después de llegar al Deportivo Alavés Mariano tuvo este martes sus primeros minutos como albiazul. Sin estar a prueba tan siquiera, según el club, y sí más bien para adquirir un tono físico ideal, el caso es que el exjugador del Real Madrid acumuló ante el Athletic 45 minutos del primer envite de pretemporada.
Fue toda la segunda parte la que disputó. Entró al campo tras el descanso formado pareja de ataque con Villalibre, apostando Coudet por otro dibujo diferente al del primer acto. Del 4-2-3-1 inicial pasó el cuadro vitoriano a un 4-4-2 más puro.
El atacante dominicano portó el dorsal ‘5’, algo que llamó la atención. No es habitual ver a un delantero lucir un número tan bajo. Casualmente dicha camiseta la vistió durante las últimas campañas un defensa, Abqar, quien a día de hoy sigue sin firmar por ninguna escuadra, pese a haber terminado contrato con el equipo albiazul el pasado 30 de junio.
A nivel futbolístico es cierto que Mariano acusó la inactividad competitiva de estos meses atrás. Apenas tocó el balón, aunque trató en varias acciones de llevárselo ante el marcaje de Paredes y Egiluz. Trató de conectar con el balón en el origen de la jugada que dio lugar al único gol del encuentro, el que anotó un activo Selu Diallo nada más comenzar el segundo tiempo.
Mariano pagó el lógico peaje de no conocer todavía a sus compañeros y apenas pudo combinar con Villalibre. Cierto es que conforme pasaban los minutos, el Deportivo Alavés fue perdiendo presencia ofensiva lo que dificultó aún más que Mariano pudiera ofrecer detalles de calidad.
Eso sí, no rehuyó en ningún momento la disputa y la pelea por cualquier pelota que pasaba cerca de su posición. Así, en el minuto 83 cuerpeó con Paredes mientras esprintaba por un desplazamiento largo tratando de obtener el rédito de un saque de esquina. A punto estuvo de conseguirlo, aunque al menos logró que la posesión siguiera siendo vitoriana en forma de saque de banda.
Cuarenta y cinco minutos para seguir cogiendo tono, en suma. Al finalizar el choque, saludo con sus compañeros e incluso algún que otro joven seguidor que se le acercó a pedirle la camiseta.
Panichelli, sin vestir
La situación contraria la protagonizó Panichelli, quien viajó hasta Laguardia, pero no se vistió de corto. Un mensaje que apunta claramente a que su etapa en el conjunto vitoriano puede estar llegando a su fin ante las negociaciones entre el Alavés y el Estrasburgo para su traspaso. Es lo mismo que sucedió con Javi López hace un año, cuando también se desplazó hasta dicha localidad, para horas después anunciarse su fichaje por la Real Sociedad.