Uno de los tópicos en el mundo del fútbol reza que los delanteros van por rachas. Pues bien, Iago Aspas, más conocido como el Príncipe de las Bateas y la velada amenaza para el Deportivo Alavés este domingo en la vuelta de la competición oficial tras el parón por las selecciones nacionales, puede dar buena fe de ello. El santo y seña del celtismo, que a sus 33 años sigue impartiendo cátedra cada vez que tiene el balón entre sus pies, se halla inmerso en su peor racha de cara al gol desde que se convirtió hace lustros en uno de los delanteros de referencia de Primera División.

Nada menos que ocho partidos con la pólvora mojada, o lo que es lo mismo, la friolera de 691 minutos sin perforar la meta rival, acumula ya el talentoso futbolista nacido en Moaña (Pontevedra). Un dato que para el Alavés puede tener una lectura positiva o negativa. Por un lado, su trayectoria reciente invita a deducir que Aspas se encuentra gafado cada vez que encara al portero de turno pero, por otro, no cabe duda de que la rutilante estrella en manos de Eduardo Coudet querrá romper este mal fario cuanto antes coincidiendo con la visita del Celta a Mendizorroza.

Por tanto, convendrá no tentar a la suerte y evitar por todos los medios que la bestia despierte de su letargo. Desde que el pasado 30 de diciembre materializase el segundo gol de los gallegos en la visita del Huesca a Balaídos, Aspas ha iniciado su sequía más dolorosa en los metros finales. En este 2021 aún no ha visto puerta y el Celta, que vive año tras año de su magia en la vanguardia, lo ha acusado sobremanera perdiendo bastante fuelle a nivel clasificatorio y sumando tan solo dos victorias en este intervalo.

Los ocho compromisos ligueros sin marcar suponen un récord negativo en la sobresaliente carrera de Aspas, que con anterioridad había permanecido a lo sumo siete jornadas sin ver puerta en el arranque de las temporadas 2017-18 y 2019-20. De los diez últimos goles materializados por el Celta, ninguno ha llevado su firma. Algo chocante dada la desbordante clase de un delantero que tradicionalmente siempre tiene la portería entre ceja y ceja. Un problema añadido es que llegará fresco a Vitoria al no estar entrando últimamente en los planes de Luis Enrique para las convocatorias de la selección española.

Una inoportuna lesión muscular en Valdebebas ante el Real Madrid le hizo perder esa finura, habilidad y pegada que hacen de él un jugador tan desequilibrante. Desde entonces, el pontevedrés de 33 años no consigue exhibir ese colmillo afilado por el que tanto se ha distinguido desde tiempos inmemoriales.

No es menos cierto que durante este tiempo la mala suerte también se ha cebado con Aspas. En la reciente visita del Madrid a Balaídos, con 1-2 en contra para el Celta, estrelló en los minutos finales en la cruceta una falta magistralmente ejecutada desde la frontal. Su grito de rabia al ver cómo el balón no se colaba en la portería de Courtois retumbó con fuerza en toda Pontevedra. Un delantero vive del gol y, por mucho que Aspas sea el canalizador de todo el juego ofensivo del rival albiazul partido tras partido, no llega la ansiada liberación.

Aunque tras esta mala racha ante la portería se ha quedado rezagado en la carrera por el Pichichi, Aspas se mantiene como el máximo artillero del Celta en la actual temporada con nueve tantos. El moañés, cuyo contrato en Vigo expira en junio de 2023, continúa siendo la punta de lanza de un rival albiazul que agradece la capacidad de desequilibrio en banda de Nolito, la llegada en segunda línea de Brais Méndez y la mordiente de ese gladiador llamado Santi Mina.

En definitiva, futbolistas del máximo nivel ante los cuales la inestable defensa del Alavés pasará una nueva reválida en pos de tres puntos trascendentales de cara a la consecución de la salvación.

VICTORIA DE MAURITANIA: 'ABDA' DISPUTARÁ la copa de áfrica

63 minutos ayer. El Deportivo Alavés tendrá dos jugadores en la próxima edición de la Copa de África, prevista entre enero y febrero del año que viene. Tras el pasaporte conseguido hace días por Jesús Owono, guardameta cedido en el San Ignacio, Abdallahi también ha hecho realidad su objetivo gracias a la victoria por la mínima (0-1) rubricada por Mauritania ante la República Centroafricana. La selección del futbolista albiazul consolidó de esta forma su segundo puesto del grupo E con un triunfo que no le hizo depender del resultado entre Marruecos y Burundi. Abdallahi disputó 63 minutos antes de ser relevado por su técnico.