- Hablar de finales o choques decisivos en el mes de febrero tal vez parezca algo precipitado, pero tras lograr nulo crédito frente a los equipos que ocupan las posiciones más altas de la tabla (Sevilla, Real Madrid, Barça y Real Sociedad), el Deportivo Alavés se encuentra abocado a sacar adelante los partidos contra los rivales que comparten su mismo objetivo: continuar una temporada más en la máxima categoría. Así lo ve también la plantilla albiazul o, al menos, su máximo goleador Joselu Mato, que en la comparecencia del jueves dejó muy claro que "la permanencia pasa por ganar a Osasuna" en el derbi que disputarán albiazules y rojillos esta tarde (18.30 horas) en Mendizorroza.
El Pitu Abelardo continúa con su quebradero de cabeza particular en el lateral izquierdo. Javi López es baja segura para el partido de esta tarde y el asturiano sigue a la espera de la evolución de las molestias de rodilla de Rubén Duarte. El almeriense se entrenó con el grupo en la sesión matinal de ayer y está en la convocatoria, pero todo apunta a que se sentará en el banquillo para que Martín vuelva a ocupar el carril zurdo. Además, los otros dos jugadores que se perderán la jornada son Rodrigo Ely, aún en proceso de rehabilitación, y Pere Pons -con molestias en el isquio-. La nota positiva en el apartado de bajas la han puesto el argentino Rodrigo Battaglia, que vuelve a estar a disposición del entrenador albiazul tras perderse el derbi de Anoeta, y Ximo Navarro -ya recuperado al cien por cien-.
Obligado a ganar, el Deportivo Alavés tendrá enfrente a un rival que guarda más semejanzas que diferencias con el propio conjunto vitoriano. Tal y como explicó Sergio Herrera en su entrevista a este periódico, se van a ver las caras dos equipos a los que les gusta "arriesgar poco con el balón, defender juntos y limitar las ocasiones". "Lo esperado será ver un partido muy similar al de El Sadar -que acabó con empate a uno- y quien se adelante en el marcador tendrá muchas opciones de llevarse la victoria", añadió el portero rojillo. En definitiva, el Glorioso necesita olvidar las goleadas recibidas en el Camp Nou y Anoeta, reencontrarse con su versión del partido frente al Real Valladolid y, a partir de ahí, ser efectivo en ambas áreas con una versión mucho más punzante.
Osasuna, por su parte, ha tenido una trayectoria repleta de altibajos en la presente temporada. Los navarros comenzaron el curso con buenos resultados y sensaciones muy positivas, pero, de la noche a la mañana, todo eso se vino abajo y se enrolaron en una racha dantesca de trece jornadas sin conocer la victoria que, más allá de meterles en descenso, les hizo ocupar el farolillo rojo durante varias semanas. La reacción de cualquier directiva en una situación similar hubiera sido destituir a su entrenador, pero la entidad rojilla, en una muestra de paciencia inaudita para el fútbol actual, depositó su fe en Jagoba Arrasate, que fue el encargado de devolver a Osasuna a Primera División y de mantenerlo la campaña pasada, y el equipo ha conseguido revertir la situación desde que comenzó este 2021.
En lo referente a la convocatoria, el técnico vizcaíno no podrá contar con Iñigo Pérez, que sigue con molestias en el pubis, y el exalbiazul Darko Brasanac, que tendrá que cumplir con el protocolo sanitario tras ser contacto directo de un positivo por covid-19. Asimismo, las novedades en la lista de Arrasate son el portero Iván Martínez y el extremo, también con pasado alavesista, Jony Rodriguez, que está de vuelta tras superar sus problemas musculares.
En lo que respecta al historial de enfrentamientos, Mendizorroza es una visita muy rentable para Osasuna. Albiazules y rojillos se han enfrentado seis veces -en Primera División- en Mendizorroza, todas ellas, curiosamente, en los últimos 20 años y el balance es ampliamente favorable para los visitantes con cuatro victorias, un empate y una derrota.