Vitoria - La Liga Adelante enfila su última recta con cinco jornadas finales que se presentan apasionantes en la zona alta por la igualdad existente entre los muchos equipos que optan al ascenso directo y el aún más nutrido grupo que aspira al premio menor que supone el play off. Una carrera en la que todos están atentos al horizonte propio, pero en la que tampoco se puede dejar de mirar por el retrovisor para comprobar el estado de los rivales. Y en esta tesitura, con todas las andanzas conocidas a lo largo del curso, el Deportivo Alavés llega a este decisivo esprint final en la segunda posición del pelotón, situación de privilegio que tratará de conservar al final de la fase regular teniendo la ventaja en estos momentos de depender única y exclusivamente de sus propios resultados en estos cinco encuentros que todavía quedan por delante.

Con los resultados del fin de semana, todo hace indicar que la pelea por los dos primeros puestos que dan acceso directo a Primera División ha quedado reducida a solo cuatro aspirantes. Eso a día de hoy, claro está. El fin de semana próximo todo puede ser diferente de nuevo si las dinámicas de resultados varían. Pero recuperar una desventaja de cinco puntos -a la que habría que añadir el gol average-, que en estos momentos es la que tiene Osasuna (quinto) con el propio Alavés, parece prácticamente imposible. Más aún teniendo en cuenta de que en el caso de los navarros habría de superar a otros dos rivales más.

Así, Leganés, Alavés, Nàstic y Zaragoza se reparten las cartas de esta partida definitiva a cinco mangas que decidirá los dos ascensos. La ventaja clara es para los madrileños, con dos puntos de ventaja con el segundo, cuatro sobre el tercero y cinco sobre el cuarto. Por tanto, más de un partido de margen de seguridad que aún les permite tropezar sin consecuencia grave.

margen pepinero Eso sí, los madrileños han sido los grandes perjudicados del fin de semana con su empate contra el Numancia, lo que unido a la victorias de sus tres perseguidores le ha hecho perder dos puntos de ventaja. Y, encima, los pepineros tienen que afrontar el domingo un complicadísimo encuentro contra el Nàstic que se antoja como decisivo en la definición de la zona alta. Posteriormente, el equipo de Asier Garitano tendrá que recibir a un Huesca que se juega la permanencia, ir a Oviedo a visitar a un rival que está peleando por el play off, jugar de nuevo en casa ante un Llagostera que podría estar jugándose la salvación y cerrar la temporada con la siempre difícil visita a Miranda. En este tramo de la primera vuelta, el Leganés hizo once puntos.

ventaja vitoriana La situación del Alavés es privilegiada, pero mucho más apurada que la del líder. No en vano, los albiazules han salvado este fin de semana su particular match ball, ya que en caso de no haber ganado al Valladolid hubiesen caído de la zona de ascenso directo. Los dos puntos de ventaja con el Nàstic que son tres respecto al Zaragoza suponen un margen exiguo -además cabe recordar que tiene el gol average ya perdido con Leganés y Zaragoza y que recuperar dos tantos de diferencia con los catalanes parece improbable, por lo que cualquier empate desplaza a los vitorianos al último lugar- que obliga a ir al límite en un tramo final en el que se sumaron diez puntos en la primera vuelta.

Comienza el mismo el domingo con la visita a un aspirante al play off como el Alcorcón. En el vestuario alavesista se considera clave salir de Santo Domingo en ascenso directo, por lo que puntuar será clave. Comenzará después de la semana decisiva del curso, con tres partidos encadenados en siete días. La Ponferradina llegará a Vitoria jugándose la permanencia, el derbi con el Athletic en Barakaldo será contra un Athletic ya seguramente descendido y se cerrará este ciclo en Mendizorroza contra un Numancia que ya no debería estar jugándose nada. Para terminar, un duelo con el Nàstic que puede dilucidar muchas cosas o ninguna.

duro final tarraconense El tercero en discordia es el propio equipo tarraconense, que busca su segundo ascenso consecutivo tras subir hace un año de Segunda B. Los catalanes están firmando una campaña memorable, están a solo dos puntos de la segunda plaza, pero tienen por delante el que, a priori, parece el calendario más complicado de los cuatro aspirantes. Eso sí, tiene tres duelos directos que en caso de victoria le pueden dar un salto enorme y además es un equipo que depende solo de sí mismo. Comenzará el Nàstic su serie recibiendo al Leganés para visitar una semana después al Zaragoza. En el partido entre semana recibirá a un Osasuna que se juega el play off y posteriormente viajará a Lugo. El cierre, ya citado, será en el Nou Estadi contra el Alavés. En la primera vuelta los de Tarragona hicieron siete puntos en estos encuentros.

ascendentes maños El último, y no por ello el menos peligroso, es el Zaragoza. Un equipo que viene lanzado desde atrás y que se está mostrando muy efectivo a través de una sólida defensa que le hace sacar mucho rendimiento de cada gol. Los maños comienzan la serie final visitando al Numancia y acto seguido tienen un partido clave en La Romareda contra el Nàstic. Llegará después el derbi con un Huesca que se estará jugando la permanencia antes de recibir a un Oviedo que estará peleando por la zona noble. El cierre del curso para los de Lluís Carreras será en la visita al Llagostera, otro rival que se puede estar jugando la vida o estar ya descendido para entonces. Los banquillos sumaron cinco puntos en esta fase en la primera vuelta.

Con la situación actual, el que alcance los 70-71 puntos se lo pondrá extremadamente complicado al resto. Con sus actuales 62, las cuentas de la lechera alavesistas perfilan la necesidad de sumar nueve más, con lo que obligaría al Nàstic a hacer once de quince y doce al Zaragoza en estos cinco encuentros. Unas cifras difíciles de alcanzar teniendo en cuenta lo que les cuesta a todos ganar.