vitoria - Con el amargor del tropiezo ante el Numancia todavía en la garganta, el Alavés dispone esta noche de la oportunidad de desterrarlo definitivamente. El conjunto vitoriano cambia de tercio y se viste de gala para afrontar una nueva eliminatoria de Copa del Rey que, por primera vez esta temporada, le enfrentará con un adversario de Primera División. En concreto será el Espanyol el que piese el césped de Mendizorroza y se convierta en el invitado de lujo de una velada para disfrutar.

Porque aunque, evidentemente, la victoria es el principal objetivo del conjunto del Paseo de Cervantes, lo cierto es que llegando hasta aquí ya ha cumplido con lo que se le requería y todo lo que llegue a partir de este momento puede considerarse un premio. Lo mismo que la posibilidad de medir fuerzas con un conjunto de la Liga de las estrellas. Una circunstancia más que satisfactoria también para una afición que, desgraciadamente, se ha visto privada de esta posibilidad en los últimos tiempos. Si a todo ello se le añade el atractivo de poder lograr un buen resultado que permite afrontar con esperanzas el duelo de vuelta en Barcelona, el menú no puede resultar más apetecible.

En el ámbito estrictamente deportivo, ambos conjuntos realizarán cambios respecto a sus formaciones habituales, si bien en el caso del Alavés serán menos como consecuencia de los problemas físicos que afectan a varios integrantes de su plantilla. Con Jarosik, Rafa García, Migue y Depotovic de baja y Manu García y Vélez arrastrando molestias de diversa consideración, serían varios los hombres que repitan presencia en el once inicial.

En el caso del Espanyol -que el pasado fin de semana rompió ante el Levante la racha de cinco jornadas consecutivas sin ganar que arrastraba-, Sergio González ha dejado fuera de la convocatoria a ocho de los once titulares en esa contienda y ha incluido a cuatro integrantes del filial (Joan Jordán, Jairo, Eric Bailly y Luque). El conjunto catalán cambiará por completo de cara y recurrirá a aquellos hombres que menos minutos de juego han tenido hasta la fecha para tratar de sacar algo positivo de Mendizorroza.