Vitoria. Tras el empate en Jaén la algarabía se ha adueñado del alavesismo, pero desde el vestuario albiazul se advierte un día detrás de otro que hay que dejar a un lado la euforia y plantear el compromiso de vuelta como si el resultado de la ida ya no existiese. Uno de los capitanes, Jaume Delgado, se sumó ayer a esa tendencia de situar el duelo del sábado en el verdadero grado de dificultad que tiene, que será elevado. "El que piense que está todo hecho se equivoca. Ya vimos que es un buen equipo y nos puso las cosas difíciles. Falta el partido de vuelta, sabemos que tenemos un poco de ventaja, pero tenemos que hacer lo mismo que hemos hecho durante todo el año. Solo nos vale ganar el partido en Mendizorroza", señaló el mediocentro catalán.
Por esta razón, Jaume tiene claro que no se puede saltar al césped pensando que el empate a cero es válido, ya que cree que tan importante como el gol conseguido en Jaén es volver a marcar en este partido: "No podemos salir pensando en el 0-0 porque en cualquier jugada te puede venir un gol. Hay que salir a ganar como cada domingo. Tenemos que salir a ganar y cuando transcurra el partido habrá que valorar lo que es mejor dependiendo del resultado".
Más que el juego del equipo, que considera que tiene que ser similar al dispuesto durante todo el curso, el centrocampista ve fundamental controlar el aspecto mental. "No vas a cambiar en una semana todo lo que has trabajado durante un año. La manera de jugar va a ser la misma y lo importante es mantener la concentración, no dejarse llevar o que no te pueda el ambiente. Estar bien de cabeza es muy importante en estos partidos", señaló.
En este sentido, apuesta por un compromiso de ritmo muy alto que le pueda pasar factura a un Jaén que ya demostró en la ida que su nivel físico puede decaer con el paso de los minutos: "Durante todo el año hemos intentado ser un rodillo y que las segundas partes se le hagan largas a los rivales. Somos un equipo fuerte físicamente y tiene que ser una baza porque ya se vio que en la segunda parte bajaron. Hay que intentar que no lleguen a los minutos finales con el marcador a favor".
Tras el partido de ida, lo que tiene claro Jaume es que el Jaén cuenta con virtudes, como el juego a balón parado, que le convierten en un oponente peligroso en cualquier acción aislada. "Somos dos buenos equipos, que hemos encajado pocos goles y hubo pocas ocasiones. Fue un partido de play off, sabiendo que quedaba la vuelta. El objetivo era meter un gol y lo conseguimos. Eso sí, no es un resultado definitivo porque el Jaén ataca con jugadores que combinan bien y allí subieron los laterales y nos hicieron dos contra uno en las bandas. A balón parado también son peligrosos. Hay que evitar esas jugadas", concluyó.