Vitoria. Alfredo Ruiz de Gauna continúa trabajando a destajo para intentar encontrar los apoyos necesarios para que el Deportivo Alavés asegure su supervivencia económica. El propietario de Viajes Bidasoa ha incrementado los contactos con posibles grupos de inversores a lo largo de las últimas horas y espera que la próxima semana pueda tener sobre su mesa respuestas definitivas, y afirmativas, que conduzcan a su desembarco en el club del Paseo de Cervantes para buscar su estabilización económica.
El empresario alavés es optimista, aunque prefiere caminar con pies de plomo porque sus intentos anteriores han terminado fracasando en el último momento. Ahora, las conversaciones vuelven a estar muy avanzadas y, por fin, se podría alcanzar el acuerdo que permita el saneamiento económico de un club que está bajo mínimos.
Durante los dos últimos meses, la frenética actividad de Ruiz de Gauna no ha encontrado el resultado buscado, ya que ni primero Guillermo Asarta ni después Javier González dieron una respuesta afirmativa a su entrada en la entidad. Precisamente, fue el representante vizcaíno quien incidió en dos de los que pueden ser puntos clave en la operación.
El primero de ellos, la salida de Fernando Ortiz de Zárate del club, está prácticamente asegurado. Ruiz de Gauna se ha ofrecido a comprarle gran parte de sus acciones para evitar que en los nuevos inversores aparezcan los síntomas de desconfianza hacia el actual presidente en acciones que han coartado muchas negociaciones. Las posturas entre ambas partes están cercanas y se podría sellar un acuerdo definitivo en breve que impedirá a Ortiz de Zárate formar parte del consejo de administración.
El segundo apartado que se considera prioritario por parte del propietario de Viajes Bidasoa es alcanzar un acuerdo con las instituciones locales para hacer frente a los pagos que hay por delante en los próximos años. El empresario alavés cree que con la ampliación de capital se podrá hacer frente al pago del privilegio y los gastos propios de la presente temporada, pero considera que es necesaria una nueva inyección económica para que las arcas no vuelvan a quedarse a cero con el proyecto de la campaña venidera y el primer pago del concurso.