Este mes se ha conocido el resultado del proceso participativo puesto en marcha desde la Diputación Foral de Álava, el pasado verano, para que fuera la propia población alavesa -a excepción de la capital, que se tramita a parte- la que propusiera sus prioridades de inversión en pueblos y municipios de las cuadrillas de Aiaraldea, Añana, Gorbeialdea, Mendialdea, Lautada y Rioja Alavesa.
En total, se recibieron 21 proyectos (cuatro de municipios de más de 2.000 habitantes, y 17 del resto) de los que, tras estudiarse para ver si cumplían los criterios económicos, jurídicos, técnicos y de competencia foral, fueron 16 los que recibieron el calificativo de viables y pasaron a votación ciudadana.
Es decir, cinco -entre los que se encontraba construir en Dulantzi una pasarela peatonal sobre la A-3140 en el Camino de Santiago- fueron descartados por no cumplir alguno de esos criterios técnicos, y en la votación popular (abierta del 23 de septiembre al 24 de octubre) han sido otros cinco los que se han quedado fuera por no lograr el quórum mínimo que estableció el ente foral, en base a la población de cada comarca, para garantizar un respaldo social representativo.
A los cinco proyectos descartados en fase técnica, se han sumado otros cinco de Luiaondo, Legutio, Bernedo, Laguardia y Arratzua-Ubarrundia, al no lograr el quórum mínimo de apoyo requerido en la votación vecinal
Se trata de la sustitución de la cubierta y la colocación de placas solares en el frontón de Luiaondo en Ayala, que solo ha recibido 22 de los 114 votos que necesitaba; la urbanización del paseo de ronda al este de Legutio, con solo dos votos de un mínimo de 84; la intervención en la vía verde del antiguo ferrocarril Vasco-Navarro entre Retana y Urbina, en el municipio de Arratzua-Ubarrundia (solo 6 votos de los 95 requeridos); acondicionar la entrada principal del pueblo de Bernedo, en Mendialdea (solo18 votos de 55); y poner en valor el Castillo de Assa en el municipio riojano alavés de Laguardia (solo 8 de los 135 votos que necesitaba).
Proyectos, todos ellos, viables y propuestos por vecinos que, sin embargo, no verán la luz en esta edición porque la propia población no los ha apoyado, más allá de que luego alcance para todos en el reparto de fondos.
Una cantidad nada desdeñable, por otro lado, ya que la Diputación Foral destina a este proceso el 0,45% del presupuesto propio (727 millones para 2026 según se anunció en noviembre), con un 35% para municipios de más de 2.000 habitantes (1.145.025 euros) y un 65% para los de menos (3.271.500 euros), “con el objetivo de avanzar en el equilibrio territorial y garantizar que las ideas ciudadanas se transformen en acciones concretas”, subrayó el diputado de Igualdad, Euskera y Gobernanza, Iñaki Gurtubai.
Los vencedores
En Artziniega, por ejemplo, ya aprendieron la lección en 2024, cuando el escaso respaldo vecinal echó por tierra la reforma del molino de Soxoguti, y en esta ocasión han sido 70 vecinos de los 49 que se necesitaban, los que se han tomado la molestia de apoyar la candidatura presentada para arreglar los relojes de la torre de plaza Garai y así culminar la mejora de una construcción del siglo XIX, que se ha convertido en el nuevo atractivo turístico local, después de que el año pasado fuera intervenida con el pintado de un mural. Y sí, el año próximo volverán a dar la hora.
Mención a parte se merece la asociación Kulturzaleak de Laudio, pues fue ella misma la que se encargó de movilizar a la población, logrando un millar de votos de los 751 que se le pedían como mínimo para obtener la ayuda con la que culminar la reconstrucción del conocido como “Castillo de Arraño” y rehabilitar la red de senderos del parque, haciendo de este elemento -que ejerce como atalaya y mirador privilegiado del conjunto monumental- el eje de esa red, permitiendo además su uso compartido como centro social para vecinos y vecinas. Algo que supondrá un nuevo hito en el proceso de mejora de su querido Parque Lamuza.
En principio serán Laudio, Artziniega, Zurbano, Erentxun, Maeztu, Lapuebla de Labarca y Valdegovía los que se repartirán los cerca de 3,3 millones reservados, aunque de sobrar dinero podrían sumarse Laguardia, Zambrana, Pobes-Hereña y Bergüenda
Asimismo, en Gorbeialdea verán rehabilitar el pozo artesiano del palacio Otazu en Zurbano (Arratzua-Ubarrundia), al recibir 139 votos de los 95 requeridos; en Lautada, crear una zona verde de esparcimiento junto a la vía verde de Erentxun, en Iruzaiz Gauna, tras recabar 118 votos de los 80 pedidos; en Mendialdea, remodelar la plaza Isaac Puente de Maeztu, que ha logrado 87 votos de los 55 que necesitaba; y en Rioja Alavesa, cubrir varias zonas de juego en Lapuebla de Labarca, con nada menos que 425 votos de los 135 requeridos.
Un respaldo, este último, que ha hecho que mejorar la eficiencia y accesibilidad en las piscinas municipales de verano de Laguardia, quede a la espera de disponibilidad presupuestaria, pese a superar el número de apoyos requerido (172 de 135 votos), ya que la convocatoria preveía seleccionar un proyecto por comarca, en la categoría de municipios de menos de 2.000 habitantes.
No obstante, desde el ente foral ya han avanzado que “en caso de que la dotación presupuestaria no se agote con los proyectos que más votos han obtenido, se abordarán el resto de iniciativas que han superado el quórum mínimo”.
Una cuestión que, sobre todo, en Añana ansían ver resuelta pues acudieron con cuatro proyectos y todos ellos han obtenido el respaldo de su población. El que se hará fijo, por más votado (465 de un mínimo de 107), es la consolidación y puesta en valor del Castillo de Astúlez, en Valdegovía.
Quedan a la espera de financiación la recuperación del lavadero de Zambrana y su entorno (142 votos); la senda de los molinos de Pobes-Hereña, en Ribera Alta (126); y la vía verde de Bergüenda, en Lantarón (111).
En estos momentos y hasta el 31 de enero se esta evaluando el proceso para identificar posibles acciones correctoras y propuestas de mejora a implementar en sucesivas ediciones. Lo que está claro es que la participación ciudadana en cuestiones de inversión pública, hasta hace poco vedadas a técnicos y políticos, ha llegado para quedarse y de cada uno de nosotros depende entrar a aportar o no.