A la espera de que la empresa concrete más datos, los 150 trabajadores de Disport en Vitoria y Agurain solo tienen preguntas sin respuesta: qué pasará con sus puestos de trabajo, desde cuándo se hace efectivo el preconcurso de acreedores, qué supone para su relación laboral con la empresa, si están aseguradas las actividades en los centros cívicos….
Nerviosismo e incertidumbre
Entre la plantilla se ha instalado el nerviosismo y la incertidumbre hasta poder aclarar algunas cuestiones porque, según explican muchos monitores, “el comunicado son cuatro párrafos y la empresa ha provocado más dudas que otra cosa”.
Un preconcurso de acreedores es un procedimiento que permite a los empresarios ganar tiempo para poder negociar o refinanciar las deudas y continuar su actividad empresarial sin problemas, evitando la necesidad de declararse en concurso de acreedores.
A través del preconcurso de acreedores una empresa en situación de endeudamiento puede iniciar negociaciones con sus acreedores y llevar a cabo un plan de reestructuración de empresas que le permita llegar a un acuerdo de pago y evitar el concurso de acreedores.
Las compañías en situación de insolvencia han de acogerse a la normativa concursal a los dos meses de que se proclame su cesación de pagos. No obstante, el preconcurso de acreedores les brinda tres meses para alcanzar un acuerdo y no experimentar la fase concursal.