Lejos del ideal común de paz y respeto para todos los pueblos y naciones, lo cierto es que la sociedad moderna actual continúa marcada por la oscuridad de las guerras. Situaciones de conflicto que bien podrían ser extraídas de historias ficticias pero que, sin embargo, son un reflejo de la realidad. Guerras que saldan sus cuentas con las vidas de miles de civiles y donde los derechos humanos y la libertad quedan marginados de forma sistemática.

Frente a estas vulneraciones se desarrolló desde hace dos años en Vitoria, como propuesta de cambio, la asociación vasca Plataforma Ciudadana por la Libertad y los Derechos Humanos. Un proyecto del que forman parte conjuntamente una veintena de personas con el objetivo de poner fin al aumento de violaciones de derechos y libertades en todo el mundo.

"Tomar partido"

“Creemos que es necesario tomar partido este asunto, para que las libertades y los derechos no se queden únicamente recogidos en tratados y declaraciones universales”, explica Natalia Urteaga, miembro de la plataforma. La iniciativa divulga, vigila y defiende derechos que, tal y como recalca Urteaga, “nos pertenecen por el mero hecho de ser humanos”.

Para ello, realizan una formación permanente donde profundizan en temas como la libertad, ética, bioética o incluso la política, entre otros. Asimismo, los miembros de la plataforma también organizan conferencias, presentaciones o entrevistas con expertos en la línea de los derechos humanos. De hecho, de cara al próximo sábado 21 de octubre está prevista una entrevista con la abogada y defensora de derechos Cristina Armas.

Por otro lado, Urteaga pone el foco también en la importancia de luchar por la libertad. “Sin libertad no podemos desarrollarnos”. asegura. Una autonomía que tal y como señala, “nace en el momento en el que la ejercemos”.