La madre de todas las ferias de Euskadi, la de Agurain, ha vuelto a demostrar este martes grande por qué razón tiene una de las citas más longevas con sus más de seis siglos de historia.

En concreto, son 628 años los que acumula ya a sus espaldas y pese a ello, han vuelto a conquistar a multitud de visitantes entre su variedad de puestos de artesanía, gastronomía, exposiciones de ganado y el otro plato fuerte de la jornada: el Concurso de Quesos de Pastor, que ha ido a parar a Patxi López de Uralde (Larrea) al obtener 314,5 puntos.

En bus

Buena prueba de ello se ha visto en la misma estación de autobuses de Vitoria desde primera hora, ya que en su andén 20, la pregunta del día era: “¿Es aquí donde para el bus a Agurain?”.

Entre uno de los que la ha formulado, poco antes de que a las 9.15 horas llegara el bus de la línea 5 de Álavabus, se encontraba Iñaki Ruiz de Pinedo, el diputado al Congreso por EH Bildu, que ha sido uno de los que se ha animado a subirse ese día al mismo.

Y no ha sido ni el único político al que se vio ese día por este encuentro agroganadero, porque paseando por la villa también estaba Amaia Barredo, diputada foral de Sostenibilidad y Agricultura, ni el único que iba a la villa, al ir lleno.

“A esta hora tan pronto a la que vamos, nos vamos a aprender lo nombres de los burros”, comentaba entre risas una de las pasajeras a Maite Ovejero, vecina de Agurain “de toda la vida”, que reside en Gasteiz desde que se casó hace cinco años.

Reencuentro familiar

“En Agurain vive mi padre y hoy tengo fiesta –decía mientras señalaba su pañuelo de cuadros del cuello–, así que hemos quedado para dar una vuelta”.

Dicho y hecho. Nada más llegar, se ha encontrado con su progenitor, Juan, y han ido directos a la exposición de ganado, que incluía el Concurso de Caballos de Monte del País Vasco, de los pocos que ya se organizan.

“Para alguien de Agurain este día supone muchísimo. Es el día grande. Es especial”

“Para alguien de Agurain este día supone muchísimo. Es el día grande. Es especial”, destacaba esta mujer.

“Llevo aquí más de 50 años y el martes de fiesta salgo temprano para dar una vuelta y ver todo. Siempre me ha gustado mucho el ganado. En mi juventud me dediqué a la transhumancia”

Lo que más le gusta de esta cita es, precisamente, la muestra de ganado. Casi tanto como a su aita. “Llevo aquí más de 50 años y el martes de fiesta salgo temprano para dar una vuelta y ver todo. Siempre me ha gustado mucho el ganado. En mi juventud me dediqué a la transhumancia”, recordaba Juan.

Ganaderos

Entre esos ganaderos que vinieron a Agurain se encontraba Iñaki López de Guereñu (San Millán) junto con sus hijos Unai, el mayor, y Oier, de 11, y su “compañero de faenas de monte”, Aitor Bergaretxea.

"Básicamente, venimos para enseñarle la feria a la nueva generación"

“Solo hemos traído un caballo y una yegua con potro, de la raza Euskal Herriko Mendiko Zaldia. En casa tienen más de 80 yeguas. Básicamente, venimos para enseñarle la feria a la nueva generación”.

Bergaretxea se refería así a Unai y Oier, este último de 11 años. Como añadía, “aquí, en la feria, ya no se vende porque se hace en casa ya todo”.

Desde Asturias

Bien lo sabía, para su pesar, otro ganadero de equino, Isaac Blanco, que llegó desde Grado (Asturias), por cuarto año, para echar un vistazo a los ejemplares e incluso a hacerse con uno, pero reconoce que es difícil comprar.

“Vengo porque me gusta este ambiente y a hacer algún trato, pero está complicado porque son más bien de exposición”

“Vengo porque me gusta este ambiente y a hacer algún trato, pero está complicado porque son más bien de exposición”, reconocía.

Tractores y motosierras

Aparte, ha habido hueco para la exposición de maquinaria agrícola y para la exhibición de tallas con motosierra y también, cómo no, para toda una hilera de puestos.

"Queremos dar visibilidad a tantos años de trabajo en Agurain a favor del euskera y recaudar fondos para todas las celebraciones de este curso por el 50 aniversario”

Entre ellos, el de la ikastola Lope de Larrea, que venía pañuelos, camisetas y bolsos “para dar visibilidad a tantos años de trabajo en Agurain a favor del euskera y recaudar fondos para todas las celebraciones de este curso por el 50 aniversario”, comentaban tras el mismo Larisa, Sigrid e Inma.

Al rico talo

"La gente valora que sean productos kilómetro cero y lo mejor es la sonrisa con la que los piden"

En la feria tampoco han faltado tentadores olores, como los de Arabako Taloak, en la plaza SanJuan. “Agurain es muy buena plaza. Venimos por segundo año desde Vitoria y muy a gusto. La gente valora que sean productos kilómetro cero y lo mejor es la sonrisa con la que los piden”, resaltaba Adrián Pérez Cabrera. Los vendía a seis euros, manteniendo así precios, “pese a la subida de la harina”.