La fuerte tormenta de este pasado lunes, que llegó acompañada de un aparato eléctrico de impresión, con miles de rayos contabilizados, y los efectos de la DANA del fin de semana han puesto nuevamente al campo alavés en alerta. No en vano, el verano meteorológico que ya ha concluido ha sido especialmente adverso para el sector primario del territorio histórico, ya que ha ofrecido al campo desde sequías hasta granizadas históricas que han malogrado infinidad de cultivos, sobre todo, cereal. Todo ello ha derivado en indemnizaciones millonarias vía seguros, compensaciones que se pueden contabilizar en un montante de alrededor de siete millones de euros.
En concreto, los datos, facilitados por Agroseguro, que es la agrupación española de entidades aseguradoras de los seguros agrarios combinados, a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, situaban en agosto el global de las compensaciones reclamadas –y concedidas– por el campo alavés en 6,4 millones de euros.
Esa cifra deviene de los daños ocasionados especialmente por la granizada de mediados de julio. La citada organización recoge en sus propios medios corporativos que fue Álava, junto a Zaragoza, las provincias que peor parte se llevaron de aquel episodio de pedrisco. En concreto, en el territorio histórico se vieron afectadas 7.643 hectáreas.
En tierras mañas fueron 5.394 hectáreas las malparadas. Entre ambos campos concentraron la mayor parte de los daños, que también se extendieron por La Rioja, Navarra, Burgos, Soria y Teruel. El cultivo con mayores daños fue el cereal de invierno, que, debido a su carácter tardío en las zonas afectadas, se encontraba aún sin cosechar, aunque se registraron daños en otra veintena de producciones.
Gracias al grado de profesionalización de los agricultores de Álava, los estragos provocados por la sequía y por los fenómenos meteorológicos adversos se pueden contabilizar.
Al menos, en la suma de las compensaciones que han tenido que pagar los seguros contratados por el sector para compensar las perdidas ocasionadas en los cultivos denominados herbáceos, que incluyen todas las variables de cereal que nacen y se cultivan históricamente en buena parte de Álava, especialmente en las comarcas cerealistas de la Llanada y Añana.
Esa cifra se estimaba en agosto en un total de 6,39 millones de euros, hoy ampliados por nuevas contingencias relacionadas con el exceso de agua en fincas puntuales.
Según indica Agroseguro, hace apenas unos días se dio curso a un pago de 393.848 euros de indemnizaciones a agricultores alaveses con pérdidas en cereales, leguminosas, patata, cultivos industriales, cultivos forrajeros y hortalizas.
En aquel entonces, la organización avisaba que la partida ya pagada era inmensa (superaba con creces los cinco millones de euros), pero que no era la definitiva. No en vano, desde Agroseguro se indicaba que lo pagado entonces era el 88,41% de lo estimado.
En el conjunto del Estado, las perdidas por los conceptos citados en esta información se elevan a cifras astronómicas que se prevén en el entorno de los 450 millones. Así, Agroseguro ha superado ya los 400 millones de euros abonados a productores de cultivos herbáceos por los siniestros registrados en la actual campaña, fundamentalmente por la sequía, aunque también por las tormentas de pedrisco ocurridas entre los meses de mayo y julio.
Esta cifra supone que el 90% de las indemnizaciones estimadas ya han sido pagadas. En concreto, los últimos pagos de los que se tienen constancia incluían 19,1 millones a productores asegurados en 13 comunidades autónomas.
La principal zona productora, Castilla y León, recibió 13,9 millones de esa cifra y suma 158,4 en total. Los mayores pagos acumulados corresponden a las provincias de Soria (37,3 millones), Burgos (33,4 millones), Valladolid (27,1 millones) y Palencia (20,3 millones). Además, destacan las indemnizaciones ya abonadas a los agricultores en Castilla-La Mancha (68,7 millones), Cataluña (51,9 millones), Andalucía (51,5 millones), Aragón (39 millones), Navarra (12,1 millones), Extremadura (6,3 millones), País Vasco (5,6 millones), La Rioja (4,6 millones) y Comunidad de Madrid (4,1 millones).
En Euskadi, todos los pagos y las reclamaciones son por estragos en cultivos alaveses. La evaluación de daños en cereal de invierno, leguminosas y oleaginosas se inició en mayo, de manera paralela al tiempo de cosecha, y el pago de las indemnizaciones comenzó a continuación, consiguiéndose cumplir con el plazo medio de pago de los últimos años, situado en 30 días tras la tasación definitiva de los siniestros.
Los pagos se completarán en las próximas semanas, hasta un total, según la estimación actual, de 455 millones de euros.
Efectos de la DANA
Agroseguro recuerda que los daños registrados en producciones agrícolas o pecuarias a causa del último episodio de lluvias intensas, que en Álava no fue especialmente nocivo, sufrida este fin de semana están cubiertos por el sistema de seguros agrarios combinados.
Desde Agroseguro indican al respecto que aunque aún es pronto para conocer con exactitud el alcance que ha tenido sobre la agricultura o la cabaña ganadera, la primera impresión es que las intensas lluvias dejarán siniestros puntuales en los cultivos presentes en el campo en este momento (hortalizas, viñedo, frutales, almendro…), bien por los efectos de las lluvias, las inundaciones o el viento o por el impacto del pedrisco.
Agroseguro recuerda que todos estos riesgos están incluidos en las pólizas del seguro agrario.
Los partes de siniestro comenzarán a recibirse una vez que los agricultores asegurados puedan acceder a sus explotaciones y constatar los perjuicios provocados por las tormentas. Por ello, y con el fin de agilizar los trabajos de peritación, es conveniente que se remitan tan pronto como sea posible.
Es importante recalcar que las lluvias, donde no han provocado arrastres torrenciales o inundaciones, serán beneficiosas para cultivos de secano como el viñedo, el girasol, el almendro o el olivar, después de un verano sin precipitaciones.
Este aporte resultará especialmente beneficioso tras un año muy seco, en el que el seguro agrario alcanzará récord de indemnizaciones en cultivos herbáceos de secano a causa de la sequía: más de 450 millones de euros, de las que cerca del 95% ya han sido abonadas durante las últimas semanas. l
