El llamamiento del Departamento de Salud y Osakidetza al personal sanitario jubilado para reforzar sus plantillas en esta fase de la pandemia se ha saldado con la contratación de un total de 175 médicos y enfermeras en el conjunto de la CAV, según el último dato aportado esta semana por las autoridades sanitarias vascas. Una cifra que en el ámbito concreto de la OSI Araba, aunque Salud no ha aportado cifras por territorios ni organizaciones de salud, se aproxima a la veintena.
Los colegios profesiones del territorio se han encargado de ejercer de puente "Una veintena" de voluntarios tocaron, por ejemplo, la puerta del Colegio de Médicos de Álava, aunque finalmente han sido 11 -según fuentes de la atención primaria- los profesionales que se han incorporado a distintos centros de salud para tramitar bajas laborales.
Junto al personal facultativo, seis profesionales de la enfermería han sido repescados por la OSI Araba para reforzar el dispositivo de vacunación contra el coronavirus, según fuentes del Colegio de Enfermería de Álava. En total, 36 profesionales jubilados se habían presentado voluntarios para reincorporarse.
Decreto ley Un decreto ley aprobado por el Gobierno central el 23 de diciembre con distintas medidas para hacer frente a la pandemia dio luz verde a que sanitarios jubilados, como las dos protagonistas de esta historia, pudieran reincorporarse a los servicios de salud sin ver mermada la cuantía de su pensión y con los mismos derechos y las mismas condiciones laborales que el resto de trabajadores en activo.