- Euskadi salió ayer por primera de la zona roja desde el pasado 14 de junio. Pero, tal y como se preveía, la mejora que vienen experimentando los datos epidemiológicos los últimos días no han traído consigo de la relajación de algunas de las restricciones vigentes, como los horarios o la ampliación de los aforos en espacios culturales, comercio y hostelería. La comisión técnica del LABI, que asesora al Gobierno Vasco en la gestión de la pandemia, recomendó ayer mantener las cosas como están todo agosto. El lunes el lehendakari, Iñigo Urkullu, convocará el LABI institucional en el que se decidirán los nuevos pasos a dar, después de que los expertos se hayan mostrado dispuestos a “ajustar” las medidas de cara al mes de septiembre.
La consejera de Salud, Gotzone Sagardui, explicó que “vamos bien” después de que Euskadi haya logrado situar su tasa de incidencia acumulada los últimos 14 días por debajo de los 400 casos. La CAV arría la bandera roja. No obstante, Sagardui advirtió de que el cambio de tendencia aún no tiene un “reflejo claro” en la situación de los hospitales, donde la ocupación de Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) con pacientes afectados de coronavirus sigue siendo “alta”, con 76 enfermos atendidos en las unidades de críticos.
La consejera subrayó que los técnicos del LABI también han llamado la atención sobre la necesidad de no “perder de vista” otros factores de riesgo, como la incidencia de la variante delta, que representa ya el 90 % de todos los casos de esta enfermedad en Euskadi. En este sentido recordó que Euskadi está en un momento de “incertidumbre” debido a la “imprevisibilidad” del virus, a su capacidad de mutación, y al “peligro” que supone el hecho de que una parte muy importante de la población mundial, especialmente la de los países pobres, no haya podido acceder aún a la vacuna.
En este contexto, el LABI técnico se ha marcado tres objetivos. El primero pasa por confirmar que se mantiene la tendencia positiva en incidencia y en presión hospitalaria. Asimismo, consideran que se debe garantizar que continúa la extensión de la vacunación entre la población y que se ha de mantener la vigilancia sobre las variantes del virus. La consejera también tuvo palabras para el acuerdo alcanzado esta semana entre Lakua y las diputaciones por el que el personal de las residencias de mayores deberá someterse a un mínimo de una PCR a la semana. En este sentido, destacó que el nuevo protocolo no plantea “novedades significativas” y que únicamente establece una “adecuación” de los plazos en los que deben realizarse estas pruebas en función de la situación de la pandemia. Asimismo señaló que la vacunación “afortunadamente” reduce de forma significativa los síntomas y efectos de la enfermedad entre las personas mayores que los últimos días han dado positivo en las residencias. Pese a todo, la consejera empleó el grueso de su comparecencia para insistir a los jóvenes mayores de 12 años para que se vacunen antes del inicio del curso académico.
Medidas anticovid. Hasta el lunes, en Euskadi el cierre de la hostelería y de todas las actividades sociales y culturales seguirá siendo a la una de la madrugada, los aforos van a continuar reducidos al 35 % en todos los locales e instalaciones y se deberá utilizar la mascarilla en zonas urbanas transitadas. En recintos de más de 5.000 espectadores, como estadios de fútbol, el aforo continúa en el 20% y van a seguir cerradas las discotecas y pubs no adaptados a servicios de hostelería.