- La suspensión de los sanfermines de este año se da como segura después de las declaraciones de la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, quien aseguró ayer que no ve posible su celebración ante las perspectivas que ofrece la pandemia, lo incierto del proceso de vacunación y el carácter tan popular de las fiestas de Pamplona. "Siento mucho no dar buenas noticias respecto a la posible celebración de los sanfermines en 2021, pero una fiesta internacional como son los sanfermines, en la que vienen a Navarra millones de personas, no va a ser posible", comentó la presidenta.
En una jornada de Nueva Economía Fórum, Chivite señaló que "es verdad que todos los navarros sentimos los sanfermines como algo intrínseco a nuestra identidad, pero no es responsable alentar unas esperanzas que sinceramente creo que no van a poder ser, más allá de que puedan pasar muchas cosas de aquí a julio, difícilmente podrán celebrarse los Sanfermines".
Las palabras de la presidenta estuvieron a punto de provocar un choque institucional de primera magnitud ante el monumental enfado que generaron en el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Pamplona al considerarlas una intromisión.
Para evitar males mayores, la propia presidenta se puso en comunicación con el alcalde, Enrique Maya, para aclarar sus manifestaciones y dejar claro que, ante una pregunta, había expresado una opinión y que ella en ningún momento dijo que se habían suspendido las fiestas.
El alcalde no pudo disimular su enfado inicial, calificando de "desafortunadas" esas primeras palabras de la presidenta -las de "siento dar malas noticias"- puesto que se entiende que "vas a dar una noticia y en este caso se ha enfocado diciendo que se suspendían los Sanfermines, cuando no lo dice".
La llamada sirvió para rebajar la tensión: Maya dio por buenas las explicaciones recibidas y zanjó la polémica, insistiendo en que la competencia es del Ayuntamiento y que a día de hoy no hay una decisión definitiva.
En la comisión de Asuntos Ciudadanos celebrada ayer, el representante de Geroa Bai Patxi Leuza preguntó por la cuestión a la concejala delegada de Cultura María García-Barberena, quien insistió en que se trata de una decisión que corresponde al alcalde y quiso restar trascendencia al anuncio de Chivite: "Estoy sorprendida por el anuncio, pero creo que han sido más la valoración de los periodistas que las palabras que ha dicho la presidenta".
Por parte de EH Bildu, Joseba Asiron consideró que hay dudas sobre la competencia a la hora de decretar la suspensión y dijo que el anuncio de Chivite "revela que al alcalde Maya le pasan por los dos lados y que el seguimiento real sobre la evolución de la pandemia en Pamplona no lo está haciendo el equipo de Gobierno de Navarra Suma, si no el Ejecutivo foral".
La de ayer fue la segunda mención que hace la presidenta Chivite sobre los Sanfermines en una semana. El martes pasado fue preguntada por lo mismo, aunque entonces optó por una respuesta más cauta: "No creo que ese tipo de fiesta pueda producirse aunque sea con un calendario vacunal muy adelantado. Dudo muchísimo que eso pueda ser así".
Maya ya hizo referencia a la posible suspensión de los Sanfermines en diciembre, pero no de forma tan concluyente. "Tenemos la ilusión de que algo ocurra en San Fermín, pero las cosas no pintan bien. En todo caso, el Consistorio debe situarse en la posibilidad de que haya fiestas en julio. Imaginemos que puede haber San Fermín y no estuviéramos preparados, eso no puede ser".
El año pasado, la suspensión de los Sanfermines se hizo oficial el 21 de abril. La noticia de la suspensión fue recogida por los principales medios de comunicación estatales e internacionales, como sucedió ayer, con el anuncio sobre los Sanfermines destacando en los principales medios digitales.