amurrio - El pasado día 4 comenzó en el Parlamento vasco la largamente anunciada ponencia que, sobre la situación socioeconómica de Aiaraldea, solicitó EH Bildu en mayo, de cara a diseñar un plan de actuación interinstitucional con medidas concretas que permitan reactivar la comarca.
Sin embargo, el adelanto electoral y el clima de campaña que se respira en Euskadi han llevado a dejar pendientes para la próxima legislatura unos trabajos motivados por el alto índice de paro que registra la zona de Llodio, Amurrio, Ayala, Artziniega y Okondo, además de Orduña, Orozko, Arakaldo y Arrankudiaga-Zollo.
De hecho, la radiografía de esta comarca presentada por los convocantes de la huelga del pasado mes de enero hablaba de una tasa de paro del 16% y de que el 94% de los contratos realizados el año pasado fue temporal. A ello hay que sumar los 20 trabajadores fallecidos en los últimos once años, que la renta de los hombres es entre un 60 y un 80% superior a la de las mujeres y que entre la riqueza que se genera y el nivel de renta de los ciudadanos también hay una gran brecha. Asimismo, casi una cuarta parte de la población de la comarca tiene más de 65 años, pero “la pensión de 1.080 euros no está garantizada y muchas de estas personas viven en situación de pobreza”. Además, en Aiaraldea hay un “incremento continuado del precio de la vivienda y de los alquileres. Sin embargo, 4.215 casas están vacías, un 20,4% del total”, aseguraban sin olvidar que en la comarca “existen dos casas de apuestas y 138 establecimientos que cuentan con maquinas de juego”.
Enfrente, numerosas fábricas que han cerrado en los últimos años, como Lipmesa, Norten, Kider, Vicalde etc y continuas manifestaciones de trabajadores en defensa de sus puestos de trabajo o de unas mejores condiciones laborales, entre otras los de Dia, Artiach, Jez, Gometegui, Tubacex, Valvospain-Ituarte, Sunrise Medical, Tubos Reunidos, polideportivo Bañueta... En este último caso se encuentran seis trabajadores de la empresa Tubos Mecánicos Norte (la plantilla que trabaja en el almacén “menos el encargado y otro compañero que está de baja”, según explicaron ayer a DNA.