Vitoria. Los hechos que se les imputan ocurrieron sobre las dos y media de la tarde del 8 de mayo. A esa hora, tres individuos, dos de los cuales exhibieron armas cortas con las que amenazaron a los trabajadores, irrumpieron en la sucursal.
Los delincuentes se hicieron con cierta cantidad de dinero y acto seguido abandonaron el lugar tras quitar los teléfonos móviles a los empleados y a un cliente, y dejarlos maniatados y amordazados, ha informado este viernes el Departamento de Seguridad.
A lo largo de la investigación los agentes de la Ertzaintza hallaron numerosas evidencias que acreditaban la participación de tres sospechosos en el asalto a la sucursal bancaria. Los tres eran residentes en Gipuzkoa y contaban con numerosos antecedentes policiales.
Una vez que se emitió la autorización judicial, se puso en marcha un operativo para proceder a su detención y registrar sus viviendas con el objetivo de encontrar más pruebas que los relacionaran con los hechos.
El operativo comenzó sobre las siete de la mañana de este miércoles con la entrada en los domicilios de dos de los presuntos atracadores, ubicados en las localidades guipuzcoanas de Pasaia y Andoain. Ambos estaban en el interior de las viviendas y fueron arrestados en ese momento. La detención del tercer implicado se produjo esa misma mañana en su casa de San Sebastián.
En los registros de sus respectivas viviendas se ocuparon dos armas de fuego, bridas de plástico similares a las usadas en al asalto de Agurain, guantes de plástico, anotaciones manuscritas, cierta cantidad de dinero e incluso parte de la ropa que vestían el día del asalto.
Los tres arrestados fueron después trasladados a dependencias policiales para llevar a cabo los trámites pertinentes antes de ser presentados este viernes ante la autoridad judicial.