cerca de una veintena de colectivos con base de operaciones en Gasteiz, concretamente 28, van a desarrollar o han desarrollado ya durante este 2019 sendos proyectos para la promoción de la convivencia, la diversidad, los derechos humanos o la memoria histórica bajo el abrigo económico del Ayuntamiento. Un programa específico de ayudas impulsado por el área municipal de Convivencia y Diversidad que año tras año está generando un mayor interés entre el tejido asociativo local lo está haciendo posible. En esta ocasión, el Consistorio va a aportar a estas iniciativas tras el correspondiente proceso de selección un total de 94.975 euros, por los 84.000 de un año antes, que van a permitir poner en marcha cuatro proyectos más que en la anterior edición de esta convocatoria.
Las actividades abarcan temáticas tan variadas como la construcción de una Gasteiz más inclusiva y abierta a la interculturalidad, el fomento de la libertad sexual y de género o el recuerdo a un episodio negro que ha marcado la historia reciente como la masacre del 3 de marzo de 1976. DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA ha reunido a cinco de las personas que desde sus respectivas asociaciones se han implicado en el desarrollo de otros tantos proyectos, algunos de los cuales van a vivir su segunda edición tras una exitosa primera entrega.
Es el caso, por ejemplo, de El baobab recóndito de los recuerdos, una iniciativa que nació de la colaboración entre la asociación africanista Manuel Iradier y Medicus Mundi para dar voz a decenas de mujeres del continente africano que residen en la capital alavesa. El primer capítulo fue protagonizado por vecinas oriundas de Senegal, inmersas en un proceso de acompañamiento, mientras que el segundo tendrá a Mali como destino. “Hablan sobre ellas, sobre qué supone ser mujer africana aquí, sobre cómo se sienten o cómo se ven”, expone Lenda Ayepah, del colectivo Manuel Iradier, quien avanza que esta segunda serie de diálogos también se convertirá, como su antecesora, en libro. La asociación de mujeres de Mali Djekafo será la otra pata imprescindible para impulsar este proyecto, que cuenta con una marcada perspectiva feminista y a partir de septiembre propiciará los primeros diálogos. “Muchas veces cuando hacemos actividades ven que no se ven representadas, que no saben defender sus posturas. Hay una imagen de mujeres sumisas que queremos romper. Queremos darles esa oportunidad de que tengan voz”, contextualiza Ayepah.
Otra de las iniciativas elegidas en la convocatoria que ya ha vivido una exitosa primera edición y que tiene también como temática las migraciones es la protagonizada por la ONG Save the Children, Recetas para la convivencia, un proyecto de innovación educativa y sensibilización cofinanciado por distintas instituciones. La principal, la Agencia vasca de cooperación al desarrollo. Tomando como base la grave situación de la infancia migrante y refugiada en un contexto internacional con un número creciente de procesos de este tipo, motivados sobre todo por los conflictos armados y el hambre, escolares de Primaria, de ESO y también algunos de FP han aprendido a través de ocho unidades didácticas las causas y las consecuencias de esta realidad, así como “qué significa acoger o qué es la diversidad y su riqueza”.
Así lo expone Sara Polo, técnica de sensibilización en Save de Children que ha coordinado el proyecto, quien expone sus dos claves fundamentales: “Se trata no sólo de sensibilizar, sino de tomar conciencia de nuestra responsabilidad como sociedad de acogida”. En la primera edición de esta iniciativa, alimentada en parte con los fondos del Ayuntamiento, el joven alumnado ha trabajado estos valores, convertidos después en distintos ingredientes, a través de la cocina: Diseñando recetas, cocinándolas y haciendo un video posterior. Tres de ellas fueron premiadas, presentadas y preparadas después en el Basque Culinary Center. Empatía, respeto, libertad, solidaridad, convivencia... unidas para armar deliciosos menús.
material audiovisual De libertad, convivencia y respeto a la diversidad tuvo también mucho la iniciativa desarrollada el pasado Día del Orgullo LGTBIQ por Sidálava, que gracias a la ayuda desinteresada de decenas de gasteiztarras configuró un mosaico multicolor con diferentes frases reivindicativas en pleno corazón de la ciudad. Previamente, la asociación lanzó a través de Youtube varios vídeos alusivos a esta campaña. Bautizado como Para gustos, los colores el proyecto ha incluido también el adecentamiento de los dos bancos pintados hace un año con las banderas LGTB+ y trans, que serán recolocados en próximas fechas en el parque de la Florida.
“Quisimos reflejar que Vitoria es una ciudad que acoge la diversidad y hacerlo a través de la participación ciudadana, que fue el verdadero potencial del proyecto. Mucha gente que pasaba por allí se animó”, celebra Ana Girón, trabajadora social de Sidálava. La iniciativa, según avanza Girón, será recogida en un vídeo que todavía tiene que ser editado y que verá la luz allá por “octubre o noviembre”.
Otra iniciativa desarrollada este año en Gasteiz y que también tendrá su respectivo material audiovisual es la que impulsó el pasado febrero la iniciativa Memoria Gara en el barrio de Zaramaga, consistente en el intercambio de un chocolate y una magdalena por un recuerdo sobre la masacre del 3 de marzo. “Los testimonios que hemos ido recopilando se van a convertir en un documental”, adelanta Andoni Txasko, portavoz de Martxoak 3, que a su vez está integrada en Memoria Gara y es la asociación a la que el Ayuntamiento ha concedido la ayuda para desarrollar este proyecto, Vivencias y recuerdos del 3 de marzo.
El trabajo será desarrollado por unos jóvenes estudiantes de audiovisuales que ya están preparado el guion y que se valdrán tanto de los testimonios recogidos aquella mañana invernal como de otros recopilados en un encuentro desarrollado en el centro de mayores del barrio. “Se trata de difundir lo que pasó el 3 de marzo a través de testimonios directos, de la gente que lo vivió. Fueron unos encuentros muy productivos para conocer detalles que desconocíamos hasta ahora y para que la gente contara cosas. Para muchas fue una especie de liberación”, remarca Txasko.
Mientras tanto, Internet será el medio en el que se plasmará el proyecto Guri kontatu gurekin que ha impulsado la asociación Lumagorri HAT, que tratará de llenar un vacío frecuentemente denunciado por la comunidad LGTBIQ de la ciudad: La ausencia de un canal para comunicar de forma rápida y pormenorizada cualquier tipo de agresión contra la diversidad sexual o de género. En concreto, Lumagorri HAT va a crear una página web a través de la que podrá reportarse todas aquellas situaciones hostiles o agresiones que sufra el colectivo y proporcionar sus detalles.
La comunicación se realizará a través de un formulario breve y conciso y los datos tendrán un fin estadístico, por lo que en ningún caso sustituirán a una eventual denuncia judicial. La web tendrá también información sobre protocolos o teléfonos de interés para el colectivo LGTBIQ. “Tenemos que facilitar al máximo la recogida de datos sobre este tipo de agresiones”, contextualiza el portavoz de Lumagorri HAT, Amets Martínez de Heredita.