VITORIA - La plaza de Santa Bárbara luce desde hace medio año una renovada y actual imagen mucho más accesible y abierta al disfrute de los ciudadanos. Nada tiene que ver su fisonomía actual con los antiguos recovecos que convertían en una tortura atravesarla desde Lehendakari Leizaola hasta Desamparados. La amplitud de espacios se ha adueñado de este céntrico enclave que supone, además, la puerta de acceso al corazón peatonal de Gasteiz a cualquiera de sus diferentes vías como la calle Postas o Independencia. Es también el primero de los espacios incluidos en el proyecto Bost Enparantza con el que concurrió Gorka Urtaran a los comicios del año 2015 esgrimiéndolo como uno de sus principales ejes del programa.

El largo periodo de obras ha alterado por completo la zona y son muchos los vitorianos que ahora han descubierto el espacio. El diáfano cuadrado central por el que atraviesan los transeúntes, la concurrida zona de juegos y columpios para los más pequeños y la gran pérgola sobre la que los productores locales exhiben sus mejores viandas, son los elementos definitorios de la nueva Santa Bárbara. Este espacio empieza ya a aparecer en el radar de los ciudadanos, que ven cómo la plaza se ha convertido en uno de los epicentros de programación municipal en los más variados ámbitos. El más claro ejemplo se va a evidenciar en las próximas fiestas de Santiago y La Blanca. Ahí se van a situar los 40 puestos de artesanía que eran toda una tradición en el paseo de La Senda y Carmelo Bernaola. El cambio supondrá para muchos adentrarse un espacio al que, de otra manera, no iban a acercarse en fiestas.

En este primer medio año de nueva vida, ya ha visto también cómo ha tenido cabida una carpa para degustar lo mejor de la gastronomía vasca durante la Final Four de la Euroliga el pasado mayo. Sin apenas tiempo, el festival de las Casas Regionales, a primeros de junio, invadió y ocupó la plaza. Allí se instaló un gran escenario central para las actuaciones musicales. A su alrededor se distribuyeron los puestos de viandas llegadas desde los más variopintos lugares que contribuyeron a dar más vida y realce a esta plaza. La decisión de trasladar allí los puestos artesanos no será la última medida del Ayuntamiento de cara a popularizar la utilización de este espacio.

actuaciones pendientes El remozado aspecto que ahora luce Santa Bárbara es el primero de los ejes que articula el proyecto Bost Enparantza. Bajo esta denominación se establece una concatenación de plazas que arranca en Lehendakari Leizaola, enlaza con Santa Bárbara, sigue por Los Fueros y Celedones de Oro para culminar en la Virgen Blanca. Con la segunda legislatura de Gorka Urtaran ya en marcha, las referencias a nuevos pasos en el proyecto Bost Enparantza han desaparecido en el programa del gobierno de coalición PNV-PSE y de uno de los proyectos emblemáticos del jeltzale en los comicios de 2015. En el debe de las actuaciones todavía pendientes está el soterramiento del muelle de carga de El Corte Inglés para terminar con la tortura de ruidos que vienen sufriendo los vecinos de la zona desde hace décadas. En marzo de 2017 el apoyo del PP a los presupuestos del Gobierno Vasco logró arañar una partida de 800.000 euros para acometer esta actuación. Sin embargo, con el inicio de las obras y la confirmación del mal estado del aparcamiento subterráneo obligó a inyectar 1,6 millones de euros adicionales para terminar con las humedades. Con la reforma ya concluida no han vuelto a producirse novedades significativas respecto a la ejecución de este proyecto del que no hay más plazos ni fechas.