artziniega - El municipio de Artziniega está un tanto revolucionado desde el viernes, jornada en la que, tras cinco meses de espera desde el rodaje, se estrenó La pequeña Suiza. El segundo largometraje del director laudioarra, Kepa Sojo, que ha convertido a esta villa en el alter ego de Tellería: el imaginario pueblecito castellano anclado en medio de Euskadi, aunque termina reivindicando ser un cantón suizo, en el que transcurre la trama de esta comedia de conflictos territoriales y humor costumbrista de tintes berlanguianos.
No en vano, gran parte del rodaje transcurrió por sus calles y plazas, y muchos de sus vecinos se prestaron a hacer de figurantes, por lo que la expectación de verse en la gran pantalla está más que justificada. “Estamos seguros de que la película va a ser un éxito, y que Aiaraldea y Artziniega van a ser una de las sorpresas. Mucha gente va descubrir nuestro pueblo y comarca a través de la película. Va a ser un escaparate estupendo para que mucha gente nos conozca y venga a visitarnos”, apunta el alcalde, Íñigo Gómez, que no ha podido evitar recuperar parte del atrezzo del filme en forma de banderas suizas para engalanar edificios públicos, tales como la balconada del antiguo ayuntamiento.
Esta no es la primera vez que Artziniega se convierte en un plató de cine. Ya Koldo Serra se fijó en su casco antiguo para grabar algunas secuencias del bombardeo en Gernika y también el director de cine ruso, Algis Arlauskas, escogió “sus parajes naturales, sus edificios históricos con perfil del siglo pasado y la joya de su museo etnográfico” para rodar en 2010 Patria. Una película-documental que relata la trepidante y enigmática vida de África de las Heras, una mujer nacida en Ceuta en 1909, que llegó a ocupar un destacado puesto en los servicios secretos soviéticos en Latinoamérica y Europa durante varias décadas.
La cripta, en Llodio Con todo, Artziniega no es el único escenario ayalés destacable en La pequeña Suiza. Y es que la cripta de la iglesia de la imaginaria Tellería, donde transcurre el revolucionario hallazgo arqueológico que da pie a toda la trama, corresponde al Santuario de Santa María del Yermo en el entorno de Santa Lucía en Llodio, donde ya se llevan efectuadas tres campañas de excavaciones.
De hecho, el rodaje fue lo que precipitó la investigación en torno a una losa reutilizada como lápida en un enterramiento posterior, que se ha convertido en uno de los hallazgos más importantes realizados hasta ahora en este yacimiento. “La teníamos apoyada contra una pared pendiente de estudio y de éstas que nos vienen los del equipo de rodaje con cara de susto, porque adecentando el área de grabación la habían barrido y les había salido el dibujo de un vegetal y pensaban que habían estropeado algo”, explicó a DNA Sergio Escribano, el arqueólogo que dirige el equipo de la UPV encargado de los trabajos, tras el convenio suscrito con el Ayuntamiento de Llodio.