VITORIA - Los sindicatos CCOO y ESK han impugnado las recientes elecciones sindicales de Tuvisa ante la delegación de Trabajo del Gobierno Vasco. Según informaron ayer desde el comité de empresa, en el primero de los casos la denuncia está motivada por el supuesto reparto de papeletas de otras candidaturas en el mismo recinto y día donde se iba a producir la votación. En el segundo, la impugnación responde a la presunta entrega de varios votos por correo en las oficinas municipales en lugar de en la sede de Tuvisa, lo que a juicio de ESK “ha podido alterar el resultado final de los comicios”. Ambas centrales han solicitado que las elecciones sindicales se repitan.
El consejo de administración de la sociedad municipal de transporte abordará precisamente el resultado de los comicios y las impugnaciones en su reunión de hoy, donde analizará también los últimos datos sobre aparcamientos y viajeros, que por cierto se incrementaron el pasado noviembre un 1,49% respecto al mismo mes del año anterior.
La impugnación de las elecciones se encuentra ya en manos de un árbitro designado por Trabajo, que en los próximos días emitirá el laudo correspondiente. El resultado del arbitraje se conocerá muy probablemente antes de que concluya este año, según los cálculos de uno de los representantes de ESK. Este sindicato no se plantea recurrir a la vía judicial en caso de que el laudo no le dé la razón.
resultados Cabe recordar que ELA logró el triunfo en las elecciones con cuatro delegados, uno más de los que logró en 2014. El segundo sindicato más votado fue, precisamente, CCOO, que a priori repetirá representación con tres. Los siguieron UGT, que consiguió dos representantes -uno más que hace cuatro años-, y USO, que también repitió con dos delegados. ESK y LAB lograron sendos representantes tras perder uno cada uno.
Tras las elecciones, ELA se felicitó por haberse convertido por primera vez en el sindicato más votado en Tuvisa -en 2014 CCOO obtuvo más sufragios- y advirtió de que su victoria, ahora en manos del arbitraje, “ratifica la línea marcada” por la central en los últimos cuatro años, caracterizada “por la permanente denuncia a la gestión de la dirección, la mayoría de las veces sin el apoyo del resto del comité de empresa”. - C.M.O.