vitoria - “El derecho de entrar a un establecimiento no es del perro, sino de la persona que lo lleva. Cuando se le prohíbe el acceso a Liena, me lo están negando a mí”. Javier Rodríguez pone voz con esta denuncia pública a los miles de usuarios de perros guía que en alguna ocasión hayan podido verse envueltos en situaciones discriminatorias como las que él ha sufrido en sus carnes.
Situaciones que, “lamentablemente”, no son puntuales, según denuncia tanto este vecino de Gasteiz como la Fundación ONCE Perro Guía, la entidad encargada de asignar este tipo de canes educados y entrenados desde que son cachorros a las personas con problemas de visión. “Todavía hay personas que desconocen que este derecho -el de acceder a cualquier lugar de uso público- está garantizado por ley o que, conociéndolo, están dispuestas a impedir su libre ejercicio por prejuicios contra los perros o porque consideran que su establecimiento, vehículo o negocio es su feudo y en él pueden decidir qué leyes aplican y cuáles no”, censura esta misma organización.
Frente a este tipo de vetos, la fundación aconseja a los usuarios llevar siempre consigo una copia de la ley que rija en sus comunidades y, de persistir el problema, solicitar una hoja de reclamaciones o incluso presencia policial, como paso previo a la solicitud de apertura de un expediente sancionador ante la administración competente. En el caso alavés, la Diputación Foral de Álava. “Es conveniente seguir el trámite adecuado, ya que en otro caso la reclamación puede resultar infructuosa o dar lugar a un proceso judicial innecesario”, remarca esta organización.
sentido común La fundación reconoce que “en muchas ocasiones” las objeciones o reticencias iniciales que los usuarios se pueden encontrar “se solucionan” positivamente, aunque “por desgracia” este tipo de casos “sí son habituales”, según enfatiza de nuevo Rodríguez. “Se trata de tener un mínimo de sentido común, nada más. Muchas veces argumentan que desconocen la ley, pero ese desconocimiento no te exime de cumplirla”, puntualiza de nuevo este vitoriano. - C.M.O.
