la zona de la localidad de Peñacerrada que mira a Trebiño alberga un llamativo museo etnográfico, constituido principalmente, por maquinaria y aperos agrícolas y ganaderos que se puede visitar gratis y en cualquier momento del día o del año. Se trata del Museo Etnográfico al Aire Libre de Peñacerrada, una instalación con varios edificios de paredes de cristal y entrada permanentemente abierta. Unos simples cables aíslan la gran ‘U’ entre el centro de cada edificio y las divisiones de cristal, en cuyo interior está el material etnográfico. El centro queda diáfano para que los visitantes observen y paseen con comodidad.

Cuenta el alcalde, Juan José Betolaza, que la idea de crear este museo fue de la Asociación para los Museos Etnográficos de Peñacerrada, una agrupación local creada para poner en marcha el proyecto. Aquél grupo contó con la ayuda del Ayuntamiento y de la Junta Administrativa, que asumieron la idea y aportaron los fondos necesarios para construir los edificios que formarían parte del paseo de ronda.

La asociación fue hablando con los vecinos y les plantearon ceder al museo la maquinaria y los aperos que mantenían arrinconados y sin uso. De esa manera se creó una inmensa colección, que se fue reparando, limpiando y documentando hasta conformar una muestra de gran envergadura repartida por secciones en las diversas tareas agropecuarias: la preparación del terreno, la siembra, los trabajos del cultivo y la recolección de la cosecha.

La colección creció hasta que hace siete años hubo algún malentendido entre la asociación y la Junta Administrativa y el museo cayó en el olvido. La nueva corporación local ha retomado el proyecto y, con el apoyo de Félix López López de Ullibarri, hijo de Peñacerrada y jefe de Museos de la Diputación Foral de Álava, ha reanudado el diálogo con la asociación para que ésta lo continúe impulsando con el entusiasmo con que lo hizo en sus inicios.

En estos momentos, los edificios se encuentran limpios, ordenados y con la señalética básica instalada. Además de los carteles que hay en la zona, sobre el museo, Peñacerrada y Montaña Alavesa, en cada edificio figuran los correspondientes a los objetos y máquinas expuestas. Una impresionante muestra de los ingenios usados hasta la mecanización de las labores agrícolas.

Pero el alcalde pretende ir algo más allá y darle un mayor empaque. Se va a adecuar una parte del edificio junto al aparcamiento que un día acogió el cuartel de la Guardia Civil para ubicar allí un taller de reparación de piezas. Además, está previsto instalar un punto de información sobre las actividades en los pueblos del municipio y sobre los recursos turísticos.