Vitoria - La apuesta por la movilidad sostenible y el espacio público en Gasteiz aborda un periodo de reflexión y valoración con los seis meses, de abril a septiembre, en los que el equipo redactor va a confeccionar un primer borrador de la actualización del plan. Desde que en el año 2007 se iniciara, con el Pacto de Movilidad, la apuesta por un transporte dentro de la ciudad diferente al vehículo privado, los resultados se han ido plasmando en un notable incremento de los usuarios del transporte público, autobús o tranvía, el despegue de la bicicleta y el progresivo arrinconamiento del coche particular. Una década después llega el momento de acometer una actualización del Plan de Movilidad Sostenible y Espacio Público (PMSEP), con la realización de un diagnóstico de la situación y la identificación de los aspectos críticos relativos al modelo de movilidad del municipio. Todo este trabajo se va a acometer en diferentes fases y se fija su conclusión para el mes de diciembre.

Con la experiencia de tener abiertos cauces como el elkargune de Movilidad se busca dar continuidad a esa labor e incorporar también su punto de vista a la hora de cerrar un documento final lo más enriquecedor y con el mayor respaldo posible. Se pretende también tener una especial atención con los grupos de interés más sensibles en la activación de nuevas medidas de movilidad sostenible como asociaciones vecinales, de mujeres, personas mayores o comerciantes.

una nueva jerarquía El primer paso para tener el documento listo a finales de año, se dio el pasado día 12 con la celebración del elkargune de Movilidad y la presencia del experto Salvador Rueda, responsable de la evolución en movilidad de la ciudad en la última década. El ejecutor de modificaciones notables como la revolución en las líneas de transporte urbano en 2009, puso sobre la mesa una “nueva jerarquía en el panorama de los desplazamientos que sitúa al peatón en el lugar más destacado, seguido del transporte público, la bicicleta y en último lugar el coche privado”, concreta el responsable municipal de Espacio Público, Iñaki Prusilla. La segunda de las ideas que planteó el responsable de la Agencia de Ecología Urbana de Barcelona fue la de avanzar “hacia una accesibilidad universal, en la que ya no se habla de movilidad sino de ese otro término. Eso conlleva recuperar y devolver el espacio público para todas las personas y, en especial, a aquellas que pueden ser más vulnerables en la utilización de ese espacio como las personas mayores, niños o personas con movilidad reducida”, esboza Prusilla.

A la hora de avanzar en ese objetivo emergen elemento ya conocidos en Gasteiz como las actuaciones para el calmado del tráfico, la creación de supermanzanas o implementación de más bidegorris. Sin embargo, la actualización se encuentra aún en una fase de redacción del borrador, “sin concretar todavía tanto”, admite el edil jeltzale.

El trabajo que se ha de desarrollar de aquí a final de año está repartido entre todos los agentes implicados y va a requerir de la participación de los grupos políticos municipales y otras instituciones implicadas, junto a técnicos de departamentos. La tercera vía llegará desde la participación ciudadana canalizada a través del elkargune de Movilidad, apostando por una visión integral de la movilidad.

PRINCIPIOS RECTORES Junto a los dos grandes pilares expuestos por Salvador Rueda en su última presencia en Gasteiz, las labores de actualización van a pivotar en torno a una larga lista de 19 principios rectores que contemplan los “preceptos que habrán de inspirar y fundamentar las propuestas de movilidad y espacio público que se planteen a través de la revisión del plan”, relata el responsable de Vía Pública. Abordan estos preceptos la larga lista de cuestiones que giran en torno a la movilidad. Recomienda abordar el reto de esta cuestión abordándolo de una manera “global e integrada”, superando enfoques “cortoplacistas que puedan dar lugar a medidas parciales y contradictorias”, expone el detallado documento. Dentro de esas acciones apunta a adoptar aquellas de manera “preventiva” que incidan en una mayor seguridad vial y en la reducción de la accidentalidad, “incidiendo en los puntos de concentración de accidentes, interviniendo en la señalización y racionalizando los tiempos y la distribución de los semáforos y otros sistemas de control de tráfico”, se recomienda en el punto número ocho de los principios. En esa nueva jerarquía en la que el vehículo privado queda relegado al último lugar, desliza también una serie de acciones enfocadas a esa ubicación. “La oferta de aparcamiento para vehículos motorizados deberá quedar condicionada a otros usos preferentes del espacio público como son la estancia, la movilidad peatonal y ciclista o el transporte público”. Llega a replantear la distribución de mercancías “reduciendo el impacto del reparto y sus distorsiones, a la vez que se favorece el uso de vehículos de carga más pequeños y menos contaminantes”. En su último punto, insta a “revisar las ordenanzas municipales y la fiscalidad con el objetivo de desincentivar el uso de vehículos con motorizaciones más agresivas y contaminantes, reduciendo el impacto sonoro y las emisiones de gases de efecto invernadero y otros contaminantes”, termina el documento.

Redacción del borrador. Hasta el mes de septiembre, el equipo redactor acometerá el trabajo de elaborar un primer borrador que permita incorporar todas las variables a los escenarios.

Estudio de propuestas. Se analizarán y tendrán en cuenta las aportaciones recibidas a través del proceso participativo entre los meses de noviembre y diciembre. De esta manera se procederá a presentar el documento final en los foros que han intervenido en su elaboración, antes de proceder a recibir el respaldo del Pleno municipal.

Participación ciudadana. El proceso trata de poner en marcha un proceso de participación ciudadana y acercar la actualización del plan al resto de la ciudadanía de Gasteiz con el objetivo de que el documento revisado cuente con el mayor consenso posible.

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Principios rectores. Sobre esta cantidad de preceptos se inspirarán y fundamentarán las propuestas que habrán de aplicarse en la nueva movilidad vitoriana.