Vitoria - La sociedad municipal Ensanche 21, encargada de gestionar las ayudas a la rehabilitación de viviendas en Vitoria, quiere darle la vuelta a la manera en que lleva a cabo este proceso, mediante el cual distribuye más de dos millones de euros por año. Hasta ahora, tal y como señaló su gerente, Iñaki Díez Unzueta, la entidad funcionaba “a demanda”, respondiendo a las solicitudes que recibía de las diferentes comunidades de propietarios.

Ahora, con la elaboración de diez estudios sociourbanísticos sobre otros tantos barrios de la capital alavesa, Ensanche 21 se ve en disposición invertir el mecanismo y, a partir de marzo, desarrollar una norma municipal que le permita ser la que tome la iniciativa y proponga a los vecinos los pasos a seguir. Dar el primer paso para desarrollar una política de reformas inmobiliarias más coherente y ajustada a las necesidades de cada zona.

El punto de partida de este proceso consistió en la preparación de un bloque de cinco estudios que, posteriormente, se remitieron al Gobierno Vasco para su oficialización. Coronación, Zaramaga, Abetxuko, Ariznabarra y Adurza fueron los primeros enclaves objeto de análisis, pero Ensanche 21 ya trabaja en la catalogación de cinco nuevos distritos: El Anglo, Ensanche, San Cristóbal, Judimendi y Arana. Según Díez Unzueta, esta documentación estará lista para marzo, con lo que se podrá trabajar en el desarrollo de una norma que hará posible que la sociedad municipal se reúna con las asociaciones vecinales, les traslade sus impresiones y consensúe una nueva política de rehabilitación urbanística.

El gerente de Ensanche 21 informó de que los estudios sociourbanísticos tienen la virtualidad de permitir acceder a una financiación privilegiada para las obras de rehabilitación. Algo beneficioso para las comunidades de vecinos y que permitirá a la sociedad municipal disponer de un conocimiento muy profundo de la situación sociológica y económica de los barrios.

La elaboración de estos diez estudios ofrecerá, según Díez Unzueta, información sobre el 90% de las zonas de Vitoria en las que los edificios presentan cierta antigüedad y pueden necesitar de reformas. “Vamos a poder cambiar el enfoque de las ayudas y pasar a una planificación de oferta. Vamos a trabajar con las comunidades y los barrios en aquellas zonas que consideremos que están especialmente necesitadas de obras. Éste es un proyecto ambicioso que requerirá de un esfuerzo económico importante”, manifestó.

Con la convocatoria de ayudas de 2017 ya cerrada, Ensanche 21 iniciará en breve un nuevo proceso sobre el borrador de esta norma que incluirá las modificaciones que estimen oportunas los técnicos municipales. - A. Burdain