labastida - La construcción de la planta de almacenamiento de gas natural de Naturgas, ahora Nortegas, de Labastida, ha retrasado su inicio hasta ahora, ya que la empresa necesitaba un enganche eléctrico de baja tensión, como los que hay en los hogares, para el mantenimiento de los equipos y el suministro de luz a sus instalaciones, que se solicitó en marzo de este año.

Sin embargo, según fuentes municipales, debido previsiblemente a problemas técnicos, Iberdrola retraso la respuesta hasta el mes de mayo, ya que la toma eléctrica se debía realizar desde un equipo instalado a más de 400 metros de distancia de la futura planta. En julio se volvió a retomar el asunto, pero la eléctrica contraofertó que la toma fuera de media tensión, por lo que Nortegas tuvo que admitirlo y dar el visto bueno. Superado el inhábil agosto, la preparación del expediente se realizó a partir de septiembre y ha sido en octubre cuando, por fin, ha comenzado la construcción de la instalación con la garantía de que sí habrá suministro eléctrico.

Con esta demora, ajena a Nortegas, no fue posible cumplir con el compromiso de iniciar el suministro domiciliario en septiembre, pero la compañía está realizando los trabajos necesarios para que esto sea posible en el plazo más breve posible, según las mismas fuentes municipales. De momento, el retraso está ocasionando malestar entre los vecinos, que utilizan las redes sociales para trasladar sus quejas.

La construcción de la planta de almacenamiento, que tiene la consideración de Utilidad Pública desde el 22 de julio del año 2016, tuvo el inconveniente de que la obra afectaba a los propietarios de los dos terrenos sobre los que se está construyendo. Se trataba de dos propiedades de erial suelo no urbanizable, de 1.237 y 1.412 metros cuadrados respectivamente, uno de cuyos dueños no estaba de acuerdo con la ocupación del terreno. Por esa razón, se tuvo que iniciar el proceso de utilidad pública previa a la expropiación forzosa, ya que, según los técnicos, ese es el mejor lugar donde se puede construir la planta por su tamaño, ubicación y distribución de suelo. Se barajaron otras alternativas, pero no se encontró ninguna más que tuviera esas condiciones y no estuviese cultivada. Finalmente, el último día, antes de la expropiación forzosa, se llegó a un acuerdo y no hizo falta cerrar el proceso.

canalizaciones La distribución del gas natural se realizará a través de las canalizaciones ya existentes por las que hasta ahora circulaba el gas propano, según el acuerdo alcanzado por Repsol y Nortegas. Eso significa que la empresa gasística no necesitará ejecutar ninguna canalización más, ya que la que existe alcanza a toda la villa. La única obra necesaria es la de la planta, para la que ya hay licencia de obras desde febrero de este año.

En cuanto a los consumidores, al igual que ha sucedido en otros lugares, como es el caso de Laguardia, se les facilitará gratuitamente el cambio de los filtros adecuados en las calderas. Asimismo, aunque el precio -en la actualidad- del gas natural y del propano se han ido acercando, la ventaja es que los consumidores podrán elegir entre varios suministradores de gas natural, que ofertarán precios diferentes, mientras que el propano de Repsol no tiene competencia, porque trabaja en régimen de monopolio.

La necesidad del cambio de suministrador vino a raíz de los elevados precios del gas que servía Repsol, que se acrecentaron con la subida, por parte del gobierno central del IVA.