Vitoria. Según un comunicado de este grupo, que también critica al equipo de gobierno municipal por dejar que los conflictos laborales los paguen los ciudadanos, la actitud de los agentes para lo único que está sirviendo es para que las "multas "pierdan su carácter educativo y simplemente se vean como una venganza".
Irabazi, sobre el fondo de la polémica, sostiene que la prioridad del Ayuntamiento no pasa por aumentar la plantilla de la Policía Local sino por "replantear su funcionamiento y atención ciudadana".
A su juicio, antes de aumentar los agentes urbanos se debe corregir la situación de "interinidad" de la plantilla municipal, que cifra en torno al 40 %, para lo cual propone una comisión en la que los responsables de cada departamento y de los grupos determinen las necesidades de personal.